CAPÍTULO 16: FRENTE A PEPPERA punto de marchar hacia la aldea Pepper, Andira recuerda los últimos momentos de la conversación con el gran jefe Youmaoh, donde se ultimaban los detalles del robo:
-¿Pero entonces-pregunta Zurui.-cómo vamos a cargar todas las armas pesadas sin ser descubiertos?
-No seáis ingenuos.-contesta el viejo contramaestre Jozzy.-Veréis, hemos podido saber que cada empresa de tecnología del planeta ha contribuido con el Imperio confeccionando, cada una, un cargamento de armas distinto...y con cada cargamento han mandado también los planos de fabricación de cada arma. Eso será lo que deberéis robar.
-Ummmm.-rumia el zorro.-Entonces eso lo facilita todo.
Youmaoh encomienda a todos a marchar:
-Pues bien, ya sabéis todos lo que tenéis que hacer. Sobretodo no debéis ser descubiertos bajo ningún concepto. Ahora id a vuestras habitaciones y preparaos para marchar.
Dicho esto, todos empiezan a salir de la sala de operaciones. Todos excepto el viejo Jozzy.
-¡Espera Andira!-exclama Youmaoh.-No te vayas aún.
Andira regresa sobre sus pasos. Los demás prosiguen su camino:
-¿Qué quiere señor Youmaoh? Dígame.
-Si...Verás, Andira...-el grave tono de voz del gran jabalí se vuelve un tanto cálido.-Esta misión es muy peligrosa, y aunque confío plenamente en tí, me siento muy preocupado.
-¿Cuál es el problema, señor Youmaoh?-Andira responde imperturbable.
-Verás, tu para mi eres como una hija...no querría que te sucediera nada.
Andira no está acostumbrada a recibir tales palabras de boca de su gran benefactor. Tras unos segundos contesta:
-No se preocupe, señor. Todo saldrá bien. Traeremos los planos sin problemas.
Andira comienza a salir y Youmaoh finaliza con:
-Ten cuidado.
Andira desaparece en los pasillos.
Ahora, cuando la tarde ya comienza a caer y los rayos del Sol muestran sus tonos mas chillones, todos se encuentran a unos treinta metros de la entrada de la fortaleza secreta, listos y preparados para partir. Cargados con mochilas y zurrones para el viaje. Tan solo esperan a que se presente Kostello, que al parecer se retrasa:
-¿Por qué se retrasa tanto vuestro compañero?-pregunta Zurui dirigiéndose a Andira y Abok.
-Buah, seguro que ese cobardica se ha asustado, jujuju.-responde Pakku.
-¡Callaos!-exclama Andira.-Por ahí viene.
Desde lejos ven como la entrada de la fortaleza se abre y aparece Kostello, que se dirige hacia ellos corriendo y cargando su bolsa de utensilios. Cuando llega frente a los demás dice jadeante:
-Lo siento...ha,ha,ha...Andira...olvidé coger unas cosas.
-Si, claro.-dice Pakku.-Seguro que estabas limpiándote el culo antes de salir. ¿Te has cagado de miedo, tal vez? Jujuju.
Kostello enfurece rápidamente y se lanza a por Pakku:
-¡¡¡Serás desgraciado!!! ¡¡¡Te voy a...!!!
Pakku se pone en guardia, pero de la nada, Zurui aparece por detrás y coge a su jefe. Abok hace lo propio con su compañero:
-¡¡¡Gordo seboso!!!-grita Kostello revolviéndose entre los brazos de Abok.
-¡¡¡¿Y tú qué, cascarrabias de mierda?!!!-exclama Pakku, algo mas tranquilo que su "rival".
-Bueno,-interviene Goku con expresión seria.-¿Vamos o qué? Quiero terminar esto cuanto antes.
Entonces, sin mediar palabra, todos emprenden su camino. Mientras, desde un hueco de la gran roca-fortaleza, a modo de ventana, el gran Youmaoh y el viejo Jozzy observan como los dos grupos de piratas se alejan:
-¿Crees que serán capaces de volver sanos y salvos con los planos?-pregunta el viejo Jozzy.
-JAJAJA...-el jabalí bebe un trago de vino.-La verdad es que no lo se. Con que solo uno vuelva con los planos ya me doy por satisfecho. Jujuju.
-Ya...pero si los descubren, los piratas del desierto estaremos en grave peligro.
Youmaoh se acerca al viejo, que a su lado parece un ratoncito, y le dice:
-Tranquilo, viejo camarada...Ya me he ocupado de eso. Parece mentira que no me conozcas después de estos cuatro años...Está todo controlado. JAJAJAJAJAAAAAAAAAA.
El viejo Jozzy acaricia su bigote y dice:
-Juju...comprendo. No se porque me preocupo, juju.
-¡¡¡JAJAJAJAJAJAJAAAAAAAAAAAAA!!!
El eco de las carcajadas del gran jabalí nos lleva hasta los pasos de nuestro pequeño héroe. Los piratas y Goku deberán llegar hasta Pepper andando entre caminos rocosos y ocultos, la mejor forma de no levantar sospechas y de poder esconderse mejor. El trayecto, de esta manera, les llevará seis horas, para recorrer los veinte kilómetros de desierto que separan la fortaleza subterránea de la aldea Pepper. A la media hora de camino, y aunque el Sol ya casi ni se ve, el calor aún se nota muy pronunciado. Es entonces cuando Goku Jr. recuerda las palabras de Kami Sama:
-Escucha, jovencito...aún no estoy muy seguro de que mi decisión haya sido la correcta, pero a pesar de todo he decidido confiar plenamente en tí.
-No se preocupe, señor Kami Sama.
-¿Qué no me preocupe? ¿Cómo no me voy a preocupar? Se supone que nos ocultamos del Imperio...y lo que estamos haciendo es ir de cara hacia él.
-Si...lo se. Me ocultaré bien, lo prometo.
El viejo Dende acaricia su frente mientras anda de un lado a otro de la celda, apoyado en su bastón de madera, sus temores cada vez son mayores, pero aún así dice:
-Bien, jovencito...entonces solo me queda aconsejarte.-el alto y anciano namekiano posa su mano sobre el hombro del pequeño.-Debes ocultar tu verdadero potencial al máximo, y esconde tu ki todo lo que puedas. Debes de saber que los hombres del ejército tienen métodos mágicos para captar la presencia de las personas. Debes de ser muy sigiloso y...
-Si, lo tengo muy claro...intentaré evitar las batallas al máximo.
-Eso es, pequeño...Entonces solo puedo esperar y desearte mucha suerte.
Unos extraños y lejanos gruñidos devuelven a nuestro héroe al presente: GROUIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIRRRR, GROUIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIRRRR, GROUIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIRRRR...Goku pregunta a Pakku:
-¿Qué son esos extraños sonidos?
-Eso son los dragones-ciempiés.-responde Andira.-A estas horas, cuando el Sol cae, siempre se reúnen para cantar.
-¿Cantar?-vuelve a preguntar, extrañado, el joven, dirigiendo su mirada a la pirata.
-Si, no se sabe muy bien porque.-vuelve a hablar Andira.-Muchos científicos dicen que se trata de un ritual de apareamiento, pero entre los piratas del desierto existe la creencia de que esos cánticos son un llamamiento a los cielos.
-¿Cómo que "un llamamiento a los cielos"?
-No lo se muy bien, pero se dice que los dragones-ciempiés comprenden el sufrimiento del planeta y rezan sus plegarias, clamando al cielo para que el mundo vuelva a ser el lugar próspero que era hace unos años.
-Eso tiene mucho sentido.-interviene Pakku.-Por alguna extraña razón, desde hace unos tres años, las tierras fértiles empezaron a dejar de serlo, a la hierva le cuesta crecer y los manantiales ya no brillan con la misma luz de antes. Parece como si poco a poco el planeta se estuviera apagando.
-Vaya...no tenía ni idea...-contesta Goku.
-¿Dónde has estado todo este tiempo?-pregunta el amigo de Goku.-Parece como si no supieras nada de lo que ha ocurrido estos años. Pareces...no se...como absorto.
Goku Jr. mira al suelo mientras camina, en su mente aparecen de nuevo los recuerdos. Recuerdos sobre sus sueños, los que tuvo mientras deliraba durante años en la meseta de Yunzabito. En ellos revivía la muerte de su abuela una y otra vez. Veía el rostro de Kaarat riendo, ruín, mezquino. Su antepasado Goku, que no le dejaba llegar hasta el ser diabólico, para socorrer a su anciana Pan. Kaarat destruyendo las ciudades y convirtiéndolas en escombros llameantes. Gente sufriendo, muriendo por todas partes y lo mas agobiante y perturbador de todo; se veía a sí mismo cayendo en una profunda e infinita oscuridad que nunca acababa. Caía y caía y caía...
Esas eran las pesadillas que acompañaron a Goku Jr. durante los cuatro años de agonía que se mantuvo aislado del mundo. Goku habla:
-Pues si, Pakku...me hubiera gustado estar despierto estos años.
Pakku, extrañado, mira a Goku, pero no pregunta nada. La expresión de su amigo es triste así que decide dejar estar el tema, ahora deben centrarse en la misión.
Siguen caminando, todos tapados con andrajosos mantos que también cubren su cabeza. Goku Jr. lleva el suyo estratégicamente agarrado a su cuerpo, no quiere que se le reconozca por nada del mundo. Además, de su cuello cuelga un pañuelo rojo, que cuando lleguen a su destino, deberá tapar parte de su rostro, dejando tan solo sus ojos al descubierto. Debajo de su manto, la ropa de Goku Jr. es la misma que llevaba su antepasado Goku en su última batalla en el mundo terrenal; un kimono azul oscuro, atado con un cinto blanco, y un pantalón amarillo. Lo único que le diferencia del atuendo de su tataratatara(tataratatara)abuelo es una camiseta interior azul celeste, bien ajustada al cuerpo, que le llega a media altura del antebrazo, unas botas rojas, atadas mediante una solapa, con puntera marrón y un adorno redondo también marrón a la altura de la pantorrilla. Por último, unas muñequeras rojas en cada muñeca.
Mientras siguen su trayecto a través de grandes rocas, ni siquiera los harapos que cubren sus cuerpos les libran del mortal calor. A pesar de todo, avanzan en fila sin desfallecer. En primer lugar, y algo separada de los demás, Andira dirige el rumbo. A continuación Abok y Kostello la siguen. Después, muy de cerca, tenemos a Pakku y Goku Jr., que avanzan con paso firme y por último Zurui y Plumb caminan entre comentarios y risas. Durante la siguiente media hora, Goku y Pakku casi no hablan, pero sin poder aguantarlo mas, el amigo pirata del joven saiyan se queja:
-¡¡BUUUUUUUUUUUUUUFFFF!! Esto parece el infierno, ¡¡que calooooooooor!!
-Si, es verdad...-declara Goku Jr.-Es muy extraño...Se supone que en el desierto las noches son frías y sin embargo cuanto mas anochece mas calor hace.
-¡¡BUFF, BUFF, BUFF!!-Pakku intenta abanicarse con la mano.
-Oye, Pakku...¿puedo hacerte una pregunta?
-Pues claro, hombre. Pregunta lo que quieras.
-Verás...Es sobre esa Andira...Es muy extraña, no percibo su ki y además es muy poderosa. ¿Quién es esa chica?
Pakku, sin saber muy bien que decir, mira a su amigo:
-Ummm...No entiendo a que te refieres con eso del ki...pero tienes razón, Andira es muy misteriosa...Ella ya estaba aquí cuando yo llegué. No se exactamente cuanto tiempo hace de mi llegada, creo que unos tres años, mas o menos.-Pakku piensa unos segundos y vuelve a hablar.-Es verdad que su fuerza es tremenda...Ninguno de los piratas sabemos de donde proviene esa chica, lo único que sabemos es que ella es la favorita del Gran Youmaoh...y es la mas poderosa de todos los piratas del desierto.
-Si, a mi consiguió vencerme con mucha facilidad...
-¡¿Cómo?!-se sorprende Pakku.-¡¡¿Andira te venció?!! ¡¡Entonces es mucho mas fuerte de lo que imaginaba!!
-Bueno, jeje...digamos que me pilló desprevenido y además no pude emplear todo mi poder, pero me da la sensación de que incluso empleándome a fondo no podría vencerla...
-¡¡Uaaaaah!! Entonces es verdad que esa Andira es un monstruo.
-¿Un monstruo?
-Si, en verdad muchos piratas la temen. Ella es fría y muy retraída, no suele hablar con nadie aparte de con sus compañeros, el viejo Jozzy y el Gran Youmaoh. Incluso me ha parecido muy raro que te dirigiera antes la palabra...No suele ser propio de ella, aunque desde que nos dieron esta misión la noto un poco extraña. De todas maneras no te aconsejo que te acerques mucho a ella, es muy arrogante...La típica tía pasota...A ella no le importa nadie, trata a todos con total indiferencia.
Goku Jr. sonríe, recuerda como Andira les trajo comida a la celda:
-Pues yo no lo veo así. A mí me cae bien, jeje. Además, me gustaría volver a enfrentarme a ella.
-Bufff...No hay quien te entienda. Pero bueno, sabiendo quienes son tus antepasados es normal que quieras tomarte la revancha. Jijiji.
-No, no es por eso...
Pakku no entiende bien a su amigo. No es capaz de comprender los sentimientos de Goku Jr., unos sentimientos que le llevan de forma natural a querer probarse a sí mismo, a querer superarse, impulsado por una tremenda ansia guerrera. Goku Jr. debe ser fuerte para liberar a la Tierra de la opresión y para que la muerte de su abuela no quede impune.
Durante tres horas mas continuaron andando, la oscuridad ya era total y a pesar de eso, el calor cada vez era mas fuerte. La única suerte que han tenido es que las fuerzas aéreas del Imperio no les han descubierto, a pesar de haber sobrevolado varias veces su situación. Las formaciones pedregosas les han servido de buen escondite. Pero ahora todos empiezan a flaquear, sus piernas se doblan a causa del cansancio, el sudor cae por encima de sus ojos, enturbiándoles la visión y el calor es cada vez mas abrasador.
La única a la que parece no afectarle el viaje es Andira. No muestra señales de cansancio y el calor no parece menguar sus facultades. De repente, el pequeño Plumb se desploma en el suelo:
-¡Ey, Plumb!-grita Zurui lanzándose a socorrerlo.
Todos los demás se dan la vuelta. Pakku y Goku corren hacia ellos:
-¡¿Qué ha pasado?!-exclama Pakku.
-Se ha desmallado, jefe.-dice el zorro levantando la cabeza del pequeño.-Quizá por culpa del calor.
-Dale agua,-ordena Pakku.-échasela por la cara y por la nuca, a ver si reacciona.
Zurui saca su cantimplora del zurrón y hace lo que su jefe le manda. Plumb parece reaccionar:
-Uuuh...No...no puedo mas...
-Te dije que no vinieras pequeñajo...-dice el zorro con un tono agradable.
-No...no me llames así...De...debo continuar...-dice Plumb mientras se levanta a trompicones.
Pakku frunce el ceño y dice:
-¡Plumb, no estás en condiciones de continuar el viaje!
-Pe...pero jefe, puedo seguir adelante...No hay problema, ya se me está pasando.
-Es verdad, jefe,-dice Zurui.-él solo no puede volver. Sería muy peligroso.
Andira se acerca a ellos y dice:
-¡Escuchad, lo siento mucho pero debemos avanzar! No podemos arriesgarnos a que deis la vuelta y os descubran.
-¡Hummm!-Pakku se muestra disconforme.-¿Entonces qué propones que hagamos, espabilada?
-¿Y si descansamos un rato? Podríamos parar y reponer fuerzas.-propone Goku.
-¡Eso haremos! Pero no mas de media hora. No podemos retrasarnos tanto.-zanja el tema Andira, dándose media vuelta.
Nuestros protagonistas encuentran una cueva y se sientan en el suelo, mientras Andira se queda en la boca de la caverna de pie, vigilando el orizonte. Goku y el grupo de Pakku se sientan juntos y, unos metros mas adelante, Abok y Kostello también caen rendidos al suelo. Pakku habla:
-¿Habéis traído comida?-pregunta mientras saca un enorme bocadillo de su bolsa.
-Si, dice Zurui. Yo me he traído pescado.-Zurui saca un recipiente con sardinas.
-Yo también he traído algo, jeje.-dice Plumb mostrando un montón de bollos y dulces.
Goku Jr. no dice nada, solo observa a Andira.
-¿Y tú, Goku?-pregunta Pakku.
-¿Eh? ¿Qué?-responde Goku saliendo de su ensimismamiento.
-Que si has traído algo de comer.
-Ah, no...Los guardias nos quitaron el equipaje cuando llegamos a vuestra fortaleza.
-Jeje, lo supuse...Aquí tienes.-Pakku saca otro bocata de salchichas y se lo ofrece a su amigo.
-Ah, vaya-con los ojos iluminados Goku coge gustoso el bocadillo.-...Muchas gracias Pakku.
Todos comen, todos excepto Andira. Goku Jr. no puede dejar de fijarse en ella:
-¿Qué miras Goku?-pregunta Pakku, mientras mastica un pedazo de su bocata.
-Es demasiado extraño.
-¿El qué?
-Esa Andira, no parece nada cansada.
-Ya te lo dije, es un monstruo. Con el calor que hace y tampoco parece que se queje.
-Pues a mi me parece muy hermosa...jujuju.-se entromete Zurui.
-Sea como sea, no parece humana.-señala Pakku.
Goku Jr. se sorprende de las últimas palabras de su amigo. Es lo mismo que le dijo Kami Sama.
-¿A ti que te parece, Goku?-pregunta Zurui.-¿A qué está buena?
-Ah, si...A mi me gustaría pelear con ella...
-¿Pelear con ella? Jeje...No era a eso a lo que me refería...Pero tienes las de perder, ella es muy fuerte.
-Pero aún así, yo...
-JAJAJA, Zurui, eso lo dices porque no sabes quien es Goku, el es el descendiente de Mr. Sat...
Goku se lanza a tapar la boca de Pakku. Una vez la boca de su amigo tapada, Goku le susurra en el oído:
-Escucha, Pakku, no debes decir quien soy.
Seguidamente Goku suelta a su amigo. Pakku le mira entendiendo mas o menos lo que su amigo quiere decir:
-¿Qué pasa, por qué le has tapado la boca?-pregunta Plumb.
-Jejeje...Veréis...-trata de solucionar Pakku.-Es que Goku es muy tímido, no le gusta que le elogien...Pero él es muy fuerte...Jejeje.
-¿Ah si?-pregunta Zurui.-Entonces eres muy fuerte. Por eso te tenía tanto miedo el Gran Youmaoh.
Una voz a sus espaldas les alerta:
-Vaya, vaya, vaya.-de pie ante ellos, y con un porte arrogante, aparece Kostello.-Juju. Pero si es el grupo de piratas mas patético de todo el desierto.
Enseguida Pakku responde:
-¿Qué quieres ahora, Kostello?
-Nada, solo venía a felicitar a los debiluchos que están retrasando la misión.
-¡Piérdete, bocazas!-exclama Pakku.
-¿A quién se le ocurre traer a una misión como esta a un crío que se desmaya a la mas mínima?
Plumb mira al suelo sintiéndose culpable.
-¡¡Te estoy diciendo que te calles!!-grita Pakku.
-No se en que estaría pensando el gran Youmaoh cuando decidió que vosotros seriáis aptos para esto. Reconocedlo,-el tono de Kostello se torna mas burlón con cada palabra.-esta misión os supera.
Los ojos de Pakku se encienden como si de una gran fogata se tratara. Con un contundente movimiento, el amigo de Goku Jr. se levanta y, velozmente, golpea con un puñetazo la cara del molesto pirata. Kostello cae de espaldas al suelo. Rápidamente, Abok, Goku y Zurui se lanzan a parar la pelea. Andira deja de controlar el horizonte y centra su mirada en la riña:
-¡Ey! ¡Chicos, parad ya!-exclama Goku Jr.
Kostello se levanta del suelo con la ayuda de Abok, mientras restriega con los nudillos su mejilla y dice:
-¡Tú no te metas, escoria! ¡A mÍ no me da ordenes ningún prisionero asqueroso!
-El chico tiene razón.-recalca Abok.-Estamos todos muy tensos debido al cansancio y al calor, pero si queremos terminar con esto debemos estar unidos. Ésta no es una misión fácil, es mejor que nos calmemos y...
-¡Cállate tú también! ¡Eres un blando! ¡Por culpa de estos desgraciados nos estamos retrasando!
-¡Ya está bien!-exclama Andira acercándose a ellos.-¡Si tantas energías os sobran ya va siendo hora de que continuemos el viaje!
Con una rabia inusitada en la mirada Kostello se dirige a Pakku:
-Te juro que ésta me la vas a pagar.
-¡Anda y que te zurzan!-responde Pakku.
Acto seguido, Abok y Kostello se retiran y comienzan a recoger sus bolsas de viaje.
El camino se reanuda. Esta vez todos callan, entrando en un estado de tensión cada vez mas exasperante. Cuanto mas avanzan, mas calor, mas agobio, incluso sus cuerpos empiezan a sentir un intenso escozor. Andira sigue en cabeza manteniendo su ritmo constante, sin mostrar molestia alguna.
Una hora y media después nuestros amigos divisan algo que detiene su paso:
-¡Mirad!-dice Zurui señalando, a lo lejos, un altísimo poste metálico rojizo, terminado en una esfera amarilla brillante.-Ahí tenéis el motivo de este calor tan intenso.
-¿Qué es eso?-pregunta Abok.
-Eso es una antena que emite una especie de radiación.-completa el zorro.-Es la que provoca este calor, tan intenso que incluso escuece.
-¿Y para qué quieren provocar calor?-pregunta esta vez Goku Jr.
-Esa antena ha sido colocada por el Imperio.-contesta Andira.-Es para dificultar que los intrusos se acerquen a la base de noche. Seguramente deben de haber mas de esas por aquí cerca.
Pakku habla:
-Esto quiere decir que ya estamos cerca de Pepper.
Tras una hora mas de camino Andira sube a una gran roca, mira al orizonte y bajo sus pies aparece todo un mercado, una replaceta de puestos cerrados. En los alrededores varios vehículos y caravanas, y al fondo una gran fortaleza de roca, de grandes puertas grises y metálicas, donde, desde lo mas profundo, se divisa, sobresaliendo, la azotea de un gran edificio de color negro oscuro. Entonces, todos se dan cuenta de que se encuentran frente a Pepper. El fuero interno de Andira se estremece incontrolable.
CAPÍTULO 17: PREPARADOSBase pepper-Distribución:
Bueno, ya tenemos a nuestros personajes dispuestos para entrar en la puñetera base (bufff, no sabeis lo que tardé en inventarla y la de charlas que tuve con amigos para terminar de crearla), así que, es hora de que os explique qué es cada cosa dentro del esquema. Lo enumeraré tal y como os lo puse en la leyenda. De arriva abajo. También os diré que la base Pepper es una base donde viven y entrenan los soldados, técnicos, cocineros, brujos y altos mandos que la custodian (osea, todo el personal convive en Pepper).Ahí va:
HANGAR: Este es el sitio donde deben llegar los protagonistas. Aquí dentro están las armas y sus planos. Además, aquí también está situada la vivienda del hechicero Jinma, y también desde aquí, nuestros héroes llegarán al subsuelo de la base y encontrarán el laboratorio subterráneo.
Frente al hangar también vereis un rectangulo, dibujado con línea discontinua, dividido en dos partes. Eso es el compartimento secreto (enterrado en la arena) desde donde tendrá lugar el ataque desde el suelo. Ahí se guardan los tankes y otros vehículos pesados. Lo he colocado ahí porque será el último ataque del Imperio antes de que entren al hangar.
BARRACAS DE LOS BRUJOS: Estas barracas, dos a cada lado del hangar, son las viviendas de la división de brujos de la base. Lo he colocado ahí porque los brujos son mas poderosos que los soldados rasos, y por tanto, son los guardianes del hangar principal. En cada barraca viven unos 100 brujos.
ARSENAL DE LOS BRUJOS: Son las barracas donde los brujos guardan sus armas mágicas y sus artilugios.
GARAJE: Aquí se guardan y se reparan los vehículos terrestres de la base.
COMEDOR: Aquí comen los soldados y los brujos de la base. También aquí viven los cocineros y camareros que trabajan en él.
VIVIENDA DEL COMANDO ESPECIAL DE DEFENSA: Brute, Kenchi y Korto tienen una gran vivienda para ellos solos, donde duermen y donde guardan sus armas personalizadas.
TORRE DE VIGILANCIA: Las torres de vigilancia pues son eso, torres desde donde se controla el panorama. Son las típicas, con una metralleta en lo alto y un gran foco de luz móvil. También hice a mano un esquema del interior de estas torres, con varias plantas y algunas cosas de su interior.
He puesto, como no, dos torres de vigilancia en la entrada de la base, otra al lado de las barracas de los soldados rasos y otra frente al hangar.
GIMNASIO: Como los soldados viven en la base, deben mantenerse en forma. Vereis una línea discontinua alrededor del gym. Eso es el campo de entrenamiento. El gym solo lo utilizan los soldados rasos, que son los que usan su fuerza física y también Brute.
SALA DE TIRO: En esta sala los soldados rasos practican con las armas de tiro.
SALA DE OPERACIONES: Aquí se reúnen los soldados y los brujos de cada turno para recibir las instrucciones de cada maniobra.
SALA DE ENTRENAMIENTO PARA LOS BRUJOS: Esta es la sala donde los brujos practican sus hechizos y su brujería. Está habilitada para resistir los ataques mas fuertes y tiene en su interior hasta una biblioteca de libros de magia y hechizos.
Como veis, todos los departamentos de entrenamiento están situados mas o menos en el centro de la base, para que sean accesibles por igual para soldados y brujos.
SALA DE MANDOS Y TELECOMUNICACIONES: Aquí está, metida dentro de la roca, la instalación de telecomunicaciones y de mandos. Desde aquí se controla toda la energía, todas las instalaciones eléctricas y de energía de la base y se contacta con otros lugares del planeta. Aquí también está situada la emisora de radio que comunica con toda la base y con los transmisores de los soldados y de todos los vehículos. También aquí tienen su vivienda los técnicos que trabajan en ella.
TALLER DE REPARACIÓN Y ALMACEN DE VEHÍCULOS AÉREOS: Aquí se reparan y se guardan algunos vehículos aéreos. La línea discontinua alrededor del taller es la pista de aterrizaje.
BARRACAS DE LOS SOLDADOS RASOS: Estas son las viviendas de los soldados rasos. Lo he colocado cerca de la entrada, ya que ellos controlan mas esa zona. En cada barraca habitan unos 100 soldados.
ARSENAL DE LOS SOLDADOS RASOS: Aquí guardan sus armas y municiones los soldados rasos.
ANTIAÉREOS: Unos lanza-misiles colocados alrededor de la fortaleza de roca, dispuestos para disparar a cualquier O.V.N.I (Objeto Volador No Identificado).
GENERADORES DE ENERGÍA: Uno en cada esquina de la base, estos generadores son los que extraen la energía del planeta y la utilizan para el funcionamiento de la base. Esta energía pasa por la sala de mandos, desde donde se canaliza para ser utilizada por toda la base. También aquí las armas de ki se pueden recargar.
PUERTAS DE ENTRADA: Dos grandes portones abren paso a la base Pepper.
FORTALEZA DE ROCA: Aunque en el esquema esté dibujada de forma muy recta, en realidad es roca normal, con sus desniveles y sus cosas...vamos, lo que es roca, roca...Es una gran fortaleza de mas de 60 metros de alto que bordea toda la base y la hace inexpugnable.
-¡¡¡Venga!!! ¡¡¡Moveos!!! ¡¡Quiero mas efectivos aéreos sobrevolando la base!!
-¿No cree que está exagerando demasiado, señor Jinma?-pregunta Kenchi.
-No, no lo creo, mi servicial Kenchi. Mi presentimiento es cada vez mas fuerte. Estoy seguro de que algo ocurrirá esta noche.
-Kukuku...Si usted lo dice.
Los soldados no han dejado de moverse desde que calló la noche. Kenchi aún no está del todo convencido de que deban tener a toda la base al máximo funcionamiento. Situado al lado del viejo Jinma, justo frente a las puertas del gigantesco hangar principal, ve como los efectivos no paran de realizar apresuradas vueltas a lo largo de toda la gran extensión de la base. Las pequeñas aeronaves surcan el cielo efusivamente, controlando todo el territorio de Pepper y enfocando, con sus focos, el suelo que sobrevuelan. Desde cada una de las torretas de vigilancia, los esbirros del Imperio repasan una y otra vez los alrededores intentando buscar cualquier atisbo de amenaza o intromisión.
El viejo y raquítico Jinma da una última orden:
-Escucha, Kenchi. Avisa a Korto y Brute. Diles que tomen posiciones y mantengan a los hombres en alerta. Voy a descansar un rato en el hangar, la división de brujos se quedará protegiendo la entrada. Yo vigilaré con mi mente el panorama, intentando encontrar alguna presencia extraña.
-Hum...de acuerdo...así lo haré.-"¡Maldito viejo paranoico!"-piensa Kenchi.-"¡Como si Korto y Brute no llevaran ya varias horas activos!. ¡Todo esto es una perdida de tiempo!".
A pesar de su disconformidad, Kenchi debe obedecer a su superior, así se dirige a encontrarse con Korto, cruzando la pequeña explanada entre el hangar y el garaje, en dirección a la sala de operaciones.
Cuando llega frente a su compañero dice:
-¿Qué te parece el tinglado que ha montado el viejo?
-Kenchi, ya sabes lo que significa "un mal presentimiento".
-Kuku...pues yo veo esta noche tan tranquila como otra cualquiera, ¿o tú notas algo extraño?
-De momento no...pero nunca se sabe.
-"Nunca se sabe, nunca se sabe".-se queja Kenchi.-Pues yo sigo viendo esto como una pérdida de tiempo. Estamos gastando demasiada energía...los generadores están al máximo rendimiento. Gastamos demasiado combustible en los vehículos aéreos y los hombres ya están cansados después de tantas horas seguidas, y encima, como todos los soldados están activos no tenemos ningún turno que los renueve...
-Por algo somos el ejército del Imperio.
-Kuku...en eso tienes razón. Por lo menos hoy nuestros hombres se están ganando su sueldo. Kukukuku.
Mientras tanto, unos metros mas hacia la entrada, Brute se encarga de que los soldados rasos no pierdan el ritmo:
-¡Venga chicos, cantad conmigo! Y un, dos, tres; "si un buen soldado quieres ser".
-"Si un buen soldado quieres ser".-contestan una treintena de soldados mientras dan vueltas alrededor de sus barracas, metralleta en ristre.
-"Mucha leche has de beber".
-"Mucha leche has de beber"-seguían contestando.
Al otro lado de la base, en la parte derecha de la gran fortaleza rocosa, escondidos detrás de una caravana, nuestros piratas del desierto, acompañados por Goku Jr., ultiman los detalles para tratar de penetrar en Pepper:
-Buagh...¿Habéis oído que canción tan cutre cantan los de dentro?-dice Pakku.
-Bueno, no es momento de fijarse en eso ahora jefe.-corrige Zurui.
-Tienes razón.-añade Abok.-Es hora de decidir como entraremos ahí.
-Ummm...-relame Kostello mirando al cielo.-Pues está todo muy controlado. Hay demasiados soldados y aeronaves vigilándolo todo...Lo tenemos muy difícil.
-Si, es cierto.-dice Zurui.-No me lo esperaba, normalmente no suele estar tan controlado.
-¿Cómo lo sabes?-pregunta Andira.
-Pues, jeje...-no atina a responder el zorro.-Alguna que otra noche me he quedado de juerga en la taberna Moonlight, hasta altas horas de la noche.
-Entonces...¿Cómo lo hacemos?-pregunta Goku.
-Burlar la seguridad no es tan difícil.-dice Zurui.
-¡¿Cómo que no?!-se queja Plumb.
-Pues no, canijo. Solo debemos camuflarnos y pasar desapercibidos.
-Si, muy fácil parece eso. ¿Pero cómo lo hacemos?-pregunta esta vez pakku.
-Ahora veréis.
Zurui mete la mano en su zurrón. Rápidamente saca una pequeña piedra de forma ovalada, parecida a la forma de una cápsula Hoi-Poi. En ella se pueden leer las iniciales MG por un lado, y por el otro, de arriba abajo y diferenciado en tres divisiones, se puede leer *T1, T2 Y T3. El zorro posa su pulgar sobre la división de la piedra T1 y dice:
-¿Habéis visto las armaduras de combate de esos soldados de la entrada?
-¡¿Cómo?!-dicen todos.
-¡Mirad!
Zurui se concentra, presiona en la piedra donde dice T1 y la lanza al suelo. De repente, el pequeño óvalo empieza a dar vueltas en la tierra, creando una leve humareda. De pronto "BOOOM", una pequeña explosión, acompañada de una cortinilla de humo, precede a la aparición de un objeto muy peculiar. El humo se disipa en instantes y entonces todos exclaman:
-¡UAAAAAAAH! ¡Es una armadura del ejército!
-¿Cómo es posible eso? Eso no parecía una Hoi-Poi.-pregunta Goku.
-¡Ya entiendo!-dice Plumb.-¡Es una Magic Gu Transformable!
-Pues si, diste en el clavo, jeje.-contesta Zurui.
-¿Una “Magic Ju”?-vuelve a preguntar Goku Jr.
-No, Magic "JU" no. Es Magic "GU".-corrige Plumb.
-¿Y eso qué es?-vuelve a la carga nuestro saiyano.
-¿No lo sabes?-dice Pakku.-Magic Gu es una empresa que se dedica a crear objetos mágicos, además de unas piedras capaces de guardar objetos en su interior. Aunque hay varios tipos, como éstas, que son las Transformables.
-Si,-continúa Plumb.-están muy de moda. Desde hace unos años le hacen dura competencia en ese sentido a Capsule Corp. y sus Hoi-Poi.
-¡Ey, a lo que vamos!-interrumpe Andira.-¿Y qué se supone que haremos con esa armadura si puede saberse?
-Hum, estaba esperando que lo preguntarais, jeje.-dice el zorro.-Veréis, tengo tres Magic Gu Transformables mas. Con ellas, cuatro de nosotros podríamos disfrazarnos y pasar por soldados del Imperio.
Durante tres segundos todos mantienen el habla, pero rápidamente Kostello interviene:
-Jajajajaja...¿Y ese es tu plan? Jajajaja...Vaya tontería. ¿De veras pretendes que entremos con eso puesto?
-¿Qué hay de malo?-pregunta un tanto indignado el zorro.-Si se te ocurre algo mejor...
-¡Venga ya!-vuelve a quejarse Kostello.-Si intentamos entrar con eso seguro que nos pillan enseguida.
-Tampoco es tan mala idea.-defiende Abok.-En verdad, no tenemos ninguna otra mejor.
-Si, podríamos intentarlo.-dice Plumb, mostrándose valiente como él solo.
-¡Bah!...-Kostello de nuevo.-¿De verdad creéis que con unos trajecitos de carnaval podremos burlar a todos esos soldados? ¡Sois unos ingenuos!
Andira mira la armadura, mira al cielo, sobrevolado una y otra vez por los soldados del Imperio. Mira a Goku Jr., vuelve a mirar la armadura y finalmente dice:
-¡Bien, escuchad! No nos queda otra, así que,-su tono conciso y decidido roba la atención de todos.-yo y el prisionero iremos juntos. Nos dirigiremos hacia el extremo derecho de la fortaleza de roca, subiremos todo lo que podamos, y desde allí seguiremos el trayecto de los infiltrados.
-¿Y quiénes nos disfrazaremos?-pregunta Abok.
-Tú vendrás con nosotros.-ordena Andira.-Nuestra misión será vigilar los movimientos de la base y actuar si vemos algún signo de que pudieran descubriros-mira al grupo de Pakku.-a los demás.
-¡Ey, un momento, jefa!-Kostello se muestra totálmente en desacuerdo.-¡¡¿Significa eso que yo tengo que ir con este grupo de energúmenos?!!
-Si, tu eres el mejor ladrón de nuestro grupo.-expone Andira.
-Bueno, eso si, perooo...
-No se hable mas. ¡Venga, en marcha!
-Ey, ey, ey, ey...Un momento.-interviene Pakku dirigiéndose a Andira.-¿Quién ha dicho que aquí la que da las ordenes eres tú? Yo también soy jefe de grupo, no se si lo recuerdas.
Andira mira a Pakku y dice:
-¿No estás de acuerdo? ¿Tienes algo que objetar?
-Ummm...No, nada. Solo que me parece bien el plan.
Todos miran a Pakku con expresión de querer matarlo. Andira pronuncia sus últimas palabras antes de marchar:
-Dejémonos de tonterías y centrémonos. Abok y tú...-dirige la mirada hacia nuestro saiyano.-Eres Goku, ¿no?
-Si.-contesta.
-Vosotros dos seguidme.-continúa la chica pirata.-Los demás, poneos las armaduras y pasad por la puerta principal. Con suerte, os dejarán entrar. Debéis llegar hasta el hangar principal-Andira comienza a andar agachada hacia el extremo de la base.-¡Vamos!
Mientras Andira se aleja con Goku y Abok, Zurui y Plumb comentan:
-Vaya,-dice Plumb mirando a la pirata, que cada vez está mas lejos.-mandar si sabe mandar.
-Claro, es una mujer.-aclara el zorro.
Seguidamente, Zurui saca otras tres Magic Gu Transformables de su bolsa. Presiona en dos de ellas la división T1 y las lanza al suelo. "BO-BOOOM", dos nuevas armaduras aparecen. Seguidamente otra MG Transformable es lanzada y convertida en el atuendo de los soldados rasos del Imperio.
-Poneos los trajes.-dice el zorro.
Pakku, Plumb y Zurui comienzan a colocar las partes de las armaduras en su lugar correspondiente del cuerpo. Se colocan la parte del antebrazo, con codera incluida. La armadura que cubre el pectoral y el abdomen, las hombreras. También una especie de calzoncillos de material duro son colocados en su lugar. Para las piernas tenemos una parte que cubre la pantorrilla acompañada de una rodillera, y para los pies unos botines adornados con dos protuberancias redondas en cada extremo. Por último y para la cabeza, tenemos unos cascos ovalados, adornados con unos cuernecitos un poco mas arriba de la frente. Desde el centro del casco hasta la coronilla una parte negra con adornos redondos, y para las orejas dos redondeces que hacen las veces de transmisores.
-¡Waaah!-exclama Plumb.-¡Hasta son de nuestra medida!
-Si, el casco también.-añade Pakku, agarrándolo con las dos manos y metiendo su cabeza dentro.
-Jeje, para realizar la transformación con una MG antes hay que concentrarse un poco en el objeto que quieres que aparezca.
-Pues con el traje de Kostello debes de haberte concentrado mucho, jajaja-bromea Pakku.-...con lo gordo que está.
-¡Callaos, pardillos!-contesta el susodicho.-No se como la jefa se ha dejado enredar, pero a mí dejadme estar. No quiero saber nada de vosotros.
Kostello, entre quejas, también se coloca su armadura. Una vez disfrazados, el grupo de infiltrados se dispone a llevar a cabo su tarea. Pakku dice:
-Ya está. Estamos PREPARADOS.
GLOSARIO DE TÉRMINOS:
*Magic Gu Transformables (MGT). T1, T2, T3:
Las Magic Gu transformables tienen tres divisiones para especificar el tipo de transformación que se desea. La T viene a significar Transformación. En principio estas transformaciones tenían ciertas restricciones, como el poder convertirse en armas, pero desde que el Imperio tomó el control esta restricción ha sido eliminada:
Transformación 1 (T1):
Se trata de una transformación básica en objetos pequeños (como prendas de vestir, utensilios de poca envergadura, como puede ser una escoba o un walkman, etc.).
Transformación 2 (T2):
Se trata de transformaciones mas complejas, como vehículos de un solo pasajero (motocicletas, bicis...) o grandes equipos de sonido, por ejemplo.
Transformación 3 (T3):
Se trata de transformaciones aún mas complejas, como grandes vehículos o pequeñas viviendas.
CAPÍTULO 18: UNA ESTÚPIDA CANCIÓNUna aeronave revolotea en los alrededores de la parte derecha de la base Pepper, justo en el mismo lugar por donde ha comenzado a subir el grupo formado por Andira, Abok y Goku Jr. Los focos de luz del vehículo aéreo pasan muy pegados a ellos. Nuestro joven saiyano acomoda su pañuelo rojo al contorno de su boca y su nariz, tapando así casi todo su rostro, dejando únicamente sus ojos al descubierto. Andira hace una seña. Abok y Goku la siguen hacia una roca que sobresale en el relieve, escondiéndose tras ella.
La aeronave del Imperio pasa su luz por encima de la roca, sin advertir la presencia de nuestros protagonistas, y seguidamente continúa su camino hacia otra parte de la base. Andira habla:
-Está todo plagado. Va a ser mas difícil de lo que creía...
-Si, parece que supieran de antemano que íbamos a venir.-comenta Abok.
-Ante todo no deben descubrirnos.-avisa la pirata del desierto.
-Pues aún nos quedan unos veinte metros para alcanzar la cima.-informa el pequeño Goku.
-Entonces cubrid bien vuestros rostros y continuemos.
Las palabras de Andira parecían haber provocado al viento, que ahora comienza a soplar con una fuerza desafiante, como queriendo aplacar la marcha de nuestros ladrones. Sus capas grises empiezan a bailar en el aire, sus ropas vibran y el polvo del desierto molesta en los ojos. La pirata da una última orden antes de seguir avanzando por la pendiente de roca:
-Vamos, debemos llegar arriba cuanto antes.
Los soplidos del viento nos llevan hasta la entrada de la base, hacia donde se dirige el grupo capitaneado por Pakku.
-Parece mentira.-dice Zurui.-Antes hacía un calor terrible y ahora esta ventolera.
-Venga, que ya estamos llegando.-dice Pakku.
Con paso firme, Pakku, sus hombres y Kostello se van acercando hacia las grandes puertas grises de la base. Unas puertas de unos cuarenta metros de alto por veinte de ancho, escoltadas por dos grandes torres de vigilancia, colocadas encima de la fortaleza de roca, cada una al lado de cada portón. También, en el suelo, a cada lado, les aguardan un par de soldados, armados con unas modernas metralletas.
-Ey,-dice Plumb susurrando.-¿y qué vamos a decir para que nos dejen entrar?
-Déjame eso a mi, pequeñajo.-dice el zorro.
-¿Cómo? ¿tú?-se queja el mas joven del grupo.-¡A tí te descubrirán enseguida! Si al menos hubieras guardado tu zurrón, como hemos hecho los demás.
-Tu tranquilo, no pasa nada.-tranquiliza Zurui.
-Pche...-interviene Kostello.-vaya atajo de mamarrachos.
-Bueno, callaos ya. Dejemos que Zurui lo intente.-finaliza Pakku, dándose cuenta de que tan solo les faltan unos pocos metros para llegar a la parte derecha del portón.
Nuestros piratas se detienen frente a los dos guardias de la parte derecha de la entrada. Uno de ellos, alto y robusto dice:
-¿De dónde venís vosotros?
Rápidamente Zurui contesta:
-Somos el grupo de reconocimiento. Venimos a dar noticias al jefe.
-¿Grupo de reconocimiento? No me consta nada de un grupo de reconocimiento.
-Bueno, eso es porque partimos esta tarde y quizás el viejo Jinma no quería que nadie mas estuviera al corriente.-continúa Zurui sin titubear lo mas mínimo.-Ya sabes como es el viejo con sus caprichos.
Los dos guardias les miran fijamente, analizándolos de arriba abajo, hasta que el mismo guardia vuelve a hablar:
-Hum.-su rostro parece serio pero de pronto se torna en una mueca totalmente opuesta.-Jajaja, si, tienes razón...Jeje, todos los de la base comentamos lo mismo. El viejo se ha puesto hoy muy pesadito de la noche a la mañana.
-Si, ahora debemos entrar cuanto antes-insiste el zorro.-...El viejo nos espera.
-Siendo así pasad, pasad, que el viejo anda hoy muy estricto.-dice el guardia pulsando un botón del portón que activa el sistema de apertura.
-Venga, pues nada, ya nos vemos.
Las tremendas puertas comienzan a abrirse lentamente. Cuando ya están lo suficientemente separadas como para poder pasar, nuestros protagonistas comienzan a adentrarse en la base. Mentalmente ya comienzan a celebrar su primer logro, pero en ese momento el otro guardia los exalta con una palabra muy simple:
-¡Esperad!
Todos se giran y, raudo, Zurui pregunta:
-¿Qué ocurre?
-¿Qué es eso que llevas ahí?-dice el guardia señalando con su arma al zurrón de Zurui.
-Mierda, lo sabía.-susurra Plumb.
-¡Cállate!-dice nuestro zorro en voz baja, contestando seguidamente la pregunta del soldado.-Pues verás, esto es algo que hemos encontrado por ahí. Justo por eso hemos vuelto, para mostrárselo al jefe.
-Ah, era solo por curiosidad. Entonces entrad deprisa, las puertas no deben permanecer abiertas mucho tiempo.
Los cuatro acallan un suspiro de tranquilidad y entran, de una vez, dentro de Pepper. Al otro lado de las puertas paran en seco, y esperan a que se vuelvan a cerrar, es entonces cuando, con un tono muy leve, comentan:
-¡Buaaaah, lo hemos conseguido!-dice Plumb.
-Si, ha sido muy sencillo.-analiza Pakku.
-La verdad, no esperaba que fuera tan fácil. Fiuuuuu.-dice Zurui dando un silbido en síntoma de respiro.
-Bah, ha sido pura chiripa.-refunfuña como de costumbre Kostello.-Un poco mas y nos hubieran descubierto por culpa de esa maldita bolsa.
-Jeje...Esta bolsa es indispensable,-informa Zurui con cierto tono burlesco.-querido Kostello.
-Ey, por cierto, ¿quién es ese tal "viejo Jinma"?-pregunta Pakku.
-Es verdad...¿Cómo sabías el nombre del jefe de esta base?-refuerza Plumb la pregunta de su jefe.
-¿Pero en que mundo vivís?-se sorprende el zorro ante la ignorancia de sus compañeros.-Todo el mundo sabe que el viejo Jinma es el que controla la base Pepper desde hace años.
-Ah, ¿si? Pues no lo sabia.-dice Pakku.-Entonces ese tipo es nuestro "enemigo".
-Pues si.-contesta.
-¿Y es fuerte?-pregunta el pequeño Plumb.
-Pues claro que es fuerte.-se entromete Kostello.-Según dicen es un viejo brujo muy experimentado con la magia y la hechicería. Sus métodos no son especialmente agradables, así que, ya sabéis, rezad para que no nos encuentren o no viviremos para contarlo.
-Venga, en marcha.-cambia de tema Pakku.
Los piratas miran al frente y echan un vistazo a la base. Un buen puñado de metros les separan del hangar principal, situado al fondo de la inmensa estación militar. A su derecha lo primero que se encuentran son dos hileras con tres largos establecimientos cada una, que no son otra cosa mas que las barracas de los soldados rasos y sus arsenales. Detrás de la primera hilera nace una inmensa torre de vigilancia, levantada a unos ochenta metros del suelo. Lo que mas llama la atención de nuestros amigos son unos rarísimos contenedores gruesos, tubulares, amarillos y brillantes, fluorescentes; de unos cuarenta metros de altura y bastante anchos, colocados uno en la esquina izquierda de la base y otro en la derecha.
-¿Qué son esas cosas?-pregunta Plumb.
-Pues no lo se.-dice el zorro.-Por su situación quizás sean una especie de generadores de energía. Pero es muy raro, porque no parecen generadores de electricidad...
De repente, desde detrás de las barracas se empieza a oír un sonido de voces, voces que suenan a coro. Nuestros amigos se alertan y se dirigen a uno de esos grandes tubos brillantes, al de la parte derecha, pegado a las barracas:
-¡Escondámonos detrás de esa cosa!-exclama Pakku conteniendo su tono de voz todo lo que puede dentro de su nerviosismo.-¡Deprisa!
Desde detrás del artefacto Zurui asoma su hocico, para ver como, de entre las barracas, empiezan a aparecer un grupo de soldados, encabezados por un tremendo hombretón de orejas puntiagudas y tórax descubierto, todos entonando una extraña cancioncilla.
-¿Qué pasa Zurui? ¿Qué ves?-pregunta en voz baja Plumb.
-Chsssst...calla.-murmura el zorro.-Son los soldados...Parece que están haciendo la ronda...
-A ver.-dice Pakku apartando a su astuto compañero, para poder asomarse y corroborar la información.
Pakku queda sorprendido ante la envergadura del que parece el capitán de los soldados.
-¿Quién es ese gigantón?-pregunta.
-Ese es Brute,-responde con total seguridad nuestro zorro-humanoide.-uno de los tres encargados de la defensa de Pepper.
-¡¿Cómo?! ¡Dejadme ver!-empuja Kostello a los demás para asomarse también.
Los soldados empiezan a doblar la esquina de una de las barracas, prosiguiendo su tarea.
-¡Mierda!-se queja Kostello.-¡Si que era él! ¡Ese tipo es fortísimo!
-Si, es verdad.-completa Zurui.
-¿Y ahora qué?
-Plumb...-dice Pakku con un tono imponente.-pues ahora les seguiremos.
-¡¿Qué?!-protesta Kostello.
-Podemos pasar inadvertidos con estos trajes.-reafirma Pakku.
-¡Tú estás loco!-contesta el burdo y mezquino pirata con un deje de desesperación.-Ese tipo es capaz de matar a tres dinosaurios de un puñetazo. Si nos descubre estamos perdidos.
-Pues no nos descubrirá.-Pakku se mantiene en su posición.
-Pues no es tan mala idea.-interviene Zurui apoyando a su cabecilla.-Ese Brute es muy fuerte, eso es cierto, pero también es un poco bobo. El único modo de pasar inadvertidos es mezclarnos con los demás soldados. Brute ni siquiera se dará cuenta.
-¡Estáis todos locos! ¡Si queréis morir allá vosotros!-advierte Kostello.-¡Yo me quedo aquí!
-Pues vale.-dice Pakku y acto seguido se dirige a sus hombres.-¡Vamos!
-¡¿Cómo?!-los ojos de Kostello denotan un ligero terror.
Plumb y Zurui empiezan a seguir a Pakku, en dirección a las barracas, por el mismo lugar donde se perdieron los esbirros del Imperio.
-¡Pero serán incautos!.-maldice para sí mismo el pirata de Andira.-¡Esperadme desgraciados!
Brute y sus hombres siguen su camino, zigzagueando entre sus viviendas y canturreando:
-Si muy fuerte quieres ser.-encabeza Brute.
-Si muy fuerte quieres ser.-responden los soldados.
-Buenos manjares debes comer.-de nuevo Brute.
-Buenos manjares debes comer.
Mientras, nuestros protagonistas se acercan a la ristra de soldados en fila, y se colocan seguidamente de los últimos del todo. Y siguiéndoles de cerca, Kostello se une a ellos:
-Vaya, finalmente has venido.-dice Pakku.
-Pues claro, no puedo dejaros solos y que os descubran...
-Si, claro, claro...eso será. Jejeje.-se burla el jefe de grupo.
Tan solo dos soldados giran su cabeza y se percatan de la presencia de nuestros amigos:
-Vaya, llegáis tarde.-dice uno de ellos.
-Si,-contesta Zurui, avispado como él solo.-nos acaban de encomendar aquí.
-Bueno, pues,-contesta el otro soldado.-seguid el ritmo y no molestéis a los demás.
-Si, si...eso haremos.-responde el zorro.
-¿Qué te han dicho?-pregunta Plumb a su compañero.
-Que sigamos el ritmo.
-¿Y cómo hacemos eso?-vuelve a preguntar el pequeño pirata.
-Pues tratemos de andar al mismo paso que ellos.-dice Zurui.
Entonces otra estrofa de la canción se escucha a coro:
-Si en una pelea el polvo no quieres morder.
-Escuchad esa canción, debemos cantarla también.-propone Pakku.
-Si, es buena idea.-completa el zorro.
-¡¿Cómo?! ¡¿Cantar eso?!-de nuevo las quejas de Kostello.
-Pues si, debemos involucrarnos totálmente con estos soldados.-contesta Pakku.
-Pe...pero esa canción es estúpida...-opina Kostello.-Lo que estamos haciendo ya de por sí es una estupidez.
-¡Calla de una vez!-exclama en voz baja Plumb.-¡Solo sabes quejarte! A nosotros tampoco nos gusta, pero debemos hacerlo para pasar inadvertidos.
La voz de Brute vuelve a la carga y nuestros amigos la escuchan con atención:
-Entrenar mucho es lo que debes hacer.
Seguidamente la voz de los piratas se funde con la de los soldados, repitiendo la frase del comandante Brute. La voz de todos excepto la de Kostello, que cada vez se siente mas en desacuerdo e impotente frente a las decisiones del grupo de Pakku.
Mientras, el grupo formado por Andira, Abok y nuestro joven Goku Jr. continúa ascendiendo a través de las rocas de la gran fortaleza. El viento sigue desafiándoles, moviendo bruscamente sus ropas, como queriéndoles despojar de los mantos que recubren su cuerpo y sus cabezas, para mostrar sus rostros, su identidad.
Andira sigue sin dar muestra alguna de cansancio. A simple vista parece tan fresca como al principio del viaje, pero no así en su interior. Con cada paso que da se ve mas cerca de Pepper, mas cerca de sus recuerdos, los mismos recuerdos que la conmueven y perturban sus pensamientos. Pero Andira es fuerte, y sin mostrar ni un atisbo de flaqueza, continúa su camino:
-¡Vamos! Ya solo nos quedan unos metros.-dice echando la vista atrás, dirigiéndose a sus dos compañeros que la siguen de cerca.
-Si, Andira.-contesta Abok.-Ya queda menos, pero debemos vigilar bien que no nos descubran. Hace un momento casi nos da de lleno el foco de una de las torres de vigilancia.
De pronto una fuerte ráfaga de viento los hace parar unos segundos. Goku casi pierde su pañuelo rojo, pero rápidamente vuelve a situarlo cubriendo su nariz y su boca. Sin tiempo para reaccionar, dos vehículos aéreos se les acercan desde lejos, cegándolos con sus tremendos focos de intensa luz.
-¡Mierda! ¡Nos han descubierto!-grita Goku Jr.
-¡Deprisa, escondeos detrás de una roca!-ordena, rápida, Andira.
La pirata desaparece entre las rocas, Abok a malas penas consigue ocultarse tras un pedrusco y Goku Jr. salta hacia un saliente pedregoso.
Las dos aeronaves se acercan y observan el lugar, lo sobrevuelan tratando de encontrar algo fuera de lo normal. Pero al parecer no se han percatado de nada, la distancia quizás, o la velocidad de nuestros amigos al esconderse, han sido un toque de tremenda fortuna que tal vez no vuelva a repetirse.
En breves segundos los dos vehículos alzan el vuelo y se dirigen hacia otra zona. Goku Jr. no puede mas que sentir alivio y castigarse a sí mismo diciéndose: "Mierda, debo estar mas al tanto. Debería haber sentido el ki de esos soldados".
Una vez pasado el peligro Andira sale de su escondite y reanuda la marcha:
-¡Venga! salid. Ya ha pasado el peligro.
-Si.-dice Abok revelando su situación.-Si lo han conseguido, los demás ya hace rato que deben estar dentro.
-Esto no debería haber pasado.-aparece Goku desde detrás de Andira.-Debí haberme dado cuenta de la presencia de esos soldados.
-Venga, chico. No te martirices,-tranquiliza Abok.-Ninguno los vimos venir. Hoy la noche es muy oscura.
-Ya, pero yo...-el muchacho trata de hacerles saber que él es capaz de captar la energia de los seres vivos.-yo debería...
-Adelante.-de nuevo Andira, adelantándose y retomando su posición.
Avanzan unos metros mas, escalando roca, con los ojos inquietos, mirando hacia todos lados; tratando de ser extremadamente cautos. Diez minutos después al fin divisan la cima. Andira es la primera en subir y alcanzarla. Es entonces cuando, al mirar hacia abajo, siente un gran vuelco en su interior. Lo que antes era una aldea bienavenida ahora se ha convertido en una espantosa y enorme base del Imperio, con edificios oscuros, soldados por todas partes y vehículos monstruosos paseando en toda su extensión. Iluminada con faros de luz, colocados estratégicamente a lo largo de las paredes de la fortaleza y de los habitáculos. No era asi como Andira recordaba la Aldea Pepper.
-Ya hemos llegado.-dice Abok incorporándose al lado de su cabecilla.
-Así que esta es la dichosa base.-se incorpora también nuestro mestizo.
-Ahora-habla Andira reponiéndose y tratando de no caer en el recuerdo.-Debemos encontrar al grupo de Pakku y seguir su trayectoria.
-¿Y cómo les encontramos?-pregunta Abok.-Desde aquí todos los soldados parecen hormigas.
-Eso no es ningún problema. Yo puedo distinguir la energía de Pakku. No es muy grande pero si me esfuerzo la captaré enseguida.
-¡¿Cómo?!-se sorprende Andira.
Goku se pone de cuclillas y se concentra, tratando de encontrar el ki de su amigo entre la multitud de soldados, que se mueven en todo el pabellón. Goku se levanta.
-Ya los tengo. Están justo ahí.-Goku señala las barracas de los soldados rasos, cerca de la entrada.-Se han camuflado entre los soldados.
-¿Qué? Yo no veo nada.-expone Abok.
-Si, son los que van mas retrasados en aquel grupo.-precisa Goku.-Los cuatro últimos, están justo debajo nuestra.
-Si que son ellos.-dice Andira.-Se nota que van descompasados en comparación a los demás.
-Vaya, que vista tenéis. Entonces han logrado entrar...Por cierto,-cambia de tercio el pirata.-¿qué es eso que dijiste sobre la energía?
-Abok, no es momento para explicaciones.-expresa Andira, tratando de no desviar la atención y de centrarse en la misión.-Aún no hemos acabado. Ahora debemos seguir sus pasos y mantenernos al tanto. Si algo les ocurre tendremos que actuar de alguna forma. Además, aún corremos peligro de ser detectados.
-Si, jefa.-asiente Abok con un ligero tono de dejadez, mientras, Andira se adelanta un poco hacia el borde de la fortaleza.-Como tú digas.
-Es demasiado dura. ¿Verdad?-pregunta Goku.
Abok mira al pequeño algo sorprendido y sonríe mirando al suelo:
-Je, no te creas. A pesar de esa dureza la jefa es una persona de buen corazón.
-Si, yo también lo creo.
Tras estas palabras el pequeño se dirige también hacia donde se encuentra la pirata.
De regreso al interior de la base el otro grupo continúa pasando desapercibido:
-Si unos grandes brazos quieres tener.-entona el grandullón de Brute.
-Si unos grandes brazos quieres tener.-repiten todos, excepto Kostello.
-Mucho pescado debes comer.-una vez mas Brute.
-¡Qué estupidez!-exclama en voz baja Kostello.-¡Qué canción mas absurda y repetitiva!
-Chsssst. Calla o acabarán descubriéndonos.-susurra Pakku para cantar, seguidamente, al mismo son que todos los demás.
-Mucho pescado debes comer.
Al margen de todo, desde la puerta de uno de los arsenales de los brujos, Korto siente una voz en su interior:
-[[[Escúchame, Korto. Mis temores cada vez cobran mas sentido.]]]
-[[[¿Cómo? ¿Qué quiere usted decir señor Jinma?]]]
-[[[Noto cuatro presencias extrañas en el interior de la base.]]]
-[[[No puede ser. ¡Yo también las habría notado!]]]
-[[[Aún te falta pericia mágica para poder captar bien las presencias. Son cuatro pero no parecen demasiado fuertes.]]]
-[[[¿Cómo es posible? ¡Es imposible que hayan entrado! Tenemos a todos los efectivos trabajando duramente en las tareas de vigilancia.]]]
-[[[¡¿Dudas de mi poder mental?!]]]
-[[[No se trata de eso, señor. Es solo que...]]]-Korto titubea un poco y añade.-[[[Bien, dígame en que zona se encuentran esos intrusos.]]]
-[[[Capto su presencia justo en la entrada. En la zona de las barracas de los soldados rasos.]]]
-[[[Es imposible. Esa zona está altamente controlada por el comando de Brute, señor.]]]
-[[[Pues al parecer Brute es un poco inútil. ¡¡¡Ha dejado pasar a cuatro sabandijas a esta base!!!]]]-el tono del brujo se endurece considerablemente por momentos.-[[[¡¡¡Y sabes muy bien que eso es imperdonable!!!]]]
-[[[¡Está bien, señor! ¡Me encargaré de todo enseguida! Mandaré a Kenchi a supervisar la zona.]]]
-[[[De acuerdo, Korto, lo dejo todo en tus manos.]]]
-[[[¡Si, excelentísimo!]]]
Korto no puede creer que, justo hoy que la guardia ha sido reforzada al máximo, se hayan colado cuatro ratas tan fácilmente, pero aún así las palabras de su superior le hacen actuar de inmediato. Sin perder un minuto se dirige telepáticamente a su compañero. El monstruo con aspecto de ave se encuentra cerca de la puerta del gimnasio, capitaneando los grupos aéreos, dando ordenes desde el suelo y controlando las acciones de sus hombres:
-[[[Kenchi, debes dirigirte rapidamente a la zona de la entrada.]]]
-[[[¿Qué? ¿A qué te refieres, Korto?]]]
-[[[Al parecer el viejo Jinma ha detectado cuatro presencias extrañas en el interior de la base.]]]
-[[[Kukukukuuuu. Pero eso es imposible, Brute y sus hombres están controlando la entrada .]]]
-[[[De todos modos ve allí. Debemos asegurarnos. Quizá Brute no se haya dado cuenta de nada.]]]
-[[[Pero tú sabes igual que yo que es imposible que se haya colado ningún roedor en esta base. Para mí que el viejo chochea. Si fuera verdad tú ya habrías notado esas presencias.]]]
-[[[No nos pagan por hacer comentarios, Kenchi. ¡Estamos perdiendo demasiado tiempo!]]]
-[[[Si, si...vale, iré hacia allí aunque solo sea para demostrar que eso es imposible. Kukuku.]]]
Kenchi alza el vuelo, el gimnasio no se encuentra demasiado lejos de la entrada. Mientras, al son de una "estúpida canción", el peligro se cierne sobre los piratas del desierto.
CAPÍTULO 19: EL VIENTO TRAE UN CACAREO TERRORÍFICOLa canción prosigue. Pakku y los demás aún no son conscientes del peligro que les acecha. Entonces, Kostello propone:
-¿Y ahora qué? Me estoy hartando de seguir el ritmo de estos tipos. Deberíamos separarnos de ellos y avanzar hacia el hangar principal.
-Chssst, ¡cállate! Podrían descubrirnos.-avisa Pakku con un tono precario.
-Kostello tiene razón, Pakku.-respalda Zurui.-Estamos perdiendo demasiado tiempo.
-Ummm, pues mirad.-Pakku señala con la mirada hacia una torre de vigilancia, situada después de la primera ristra de barracas.-Ahí tenemos una torre de vigilancia. Uno de nosotros debe encargarse de que el vigilante no se percate de nuestros movimientos, los demás estaremos al tanto, y cuando estos soldados doblen la esquina de la última barraca y vuelvan a rodearlas, todos cruzaremos hacia aquel edificio.
El edificio al que Pakku se refiere, situado a continuación de las viviendas de los soldados, es un gran habitáculo de paredes negras y de forma rectangular, dividido en dos partes, una primera mas pequeña, a modo de sala de operaciones, desde donde los soldados reciben las ordenes del día. La otra parte del edificio, mucho mas amplia, y apegada a las barracas, es la sala de entrenamiento de la división de brujos. La parte trasera de este edificio, apegada a la fortaleza de roca, crea una especie de callejón al estar situada, paralelamente a la entrada de la sala de mandos y telecomunicaciones, incrustada en la roca.
-Muy bien,-declara el zorro.-podemos escabullirnos por ese callejón, entre el edificio y lo que parece la sala de mandos.
-¡Perfecto! Plumb, tu te encargarás de vigilar la torre-ordena Pakku.-y cuando sea el momento nos darás una señal, y entonces todos saldremos escopeteados hacia allí. Ten en cuenta que tu señal debe coincidir con el cambio de rumbo de estos soldados.
-Deacuerdo, jefe.-acepta el pequeño Plumb.
-Entonces estad preparados,-avisa de nuevo Pakku.-ya casi estamos llegando al final de las barracas.
Al mismo tiempo, desde el gimnasio, el ave de rapiña Kenchi se dirige, volando a toda velocidad, hacia las viviendas y arsenales custodiados por Brute y su grupo.
Por encima del grupo de Pakku, desde lo alto de la fortaleza de roca, Goku jr. y los demás observan con detenimiento el panorama:
-¡Mirad!-exclama Goku percatándose de la presencia de Kenchi.-Aquel tipo ha salido volando en dirección a esos edificios, donde se encuentra Pakku.
-Es verdad,-afirma Abok.-¿creéis qué los han descubierto?
-Esperaremos un poco a ver el desenlace de los acontecimientos.-ordena Andira, sabiéndose consciente de que se encuentran en una situación extremadamente precaria.
-¡Pero ese tipo tiene mucha mas fuerza de lo normal!-informa nuestro mestizo saiyano.-¡Si los hubieran descubierto, Pakku y los demás no podrían hacer nada contra él!
-Pakku no es tan tonto como para dejarse descubrir tan fácilmente.-recalca Andira.-Además, Kostello va con ellos y es todo un experto escabulléndose del peligro.
-¡Vosotros no lo entendéis!-insiste Goku.-Kami Sama me dijo que esta gente tiene varios métodos mágicos para captar la presencia de los seres vivos.
-¿Has dicho Kami Sama?-pregunta Abok extrañado.-Jujuju, ¿dices que Dios te ha hablado? No quisiera ofender, pero dices unas cosas muy extrañas, pequeño.
Goku Jr. queda callado, sabiendo que ha hablado mas de la cuenta. Andira, como siempre, termina la conversación tajantemente:
-Nada nos hace pensar que los han descubierto. Además, si saliéramos en su ayuda tan descaradamente se nos echarían encima todos los soldados de la base en cuestión de segundos. De momento confiemos en que Pakku y los suyos sabrán salir de ésta.
Gracias a las palabras de la chica, Goku recuerda su misión, ante todo a él no deben descubrirle, así que decide seguir las órdenes de los piratas.
-¡Ahora!-exclama Plumb, no levantando demasiado la voz.
Mientras todos los soldados doblan la esquina para comenzar, de nuevo, su vaiven zigzagueante entre los habitáculos, Pakku y los demás salen corriendo hacia el callejón, entre la sala de entrenamiento de los brujos y la sala de mandos. Una vez allí vuelven a respirar tranquilos.
-Buaaah,-sale Kostello del agobio.-ya era hora, estaba harto de escuchar a esos mierdecillas del Imperio y de sus canturreos infantiles.
-Hemos de mantener la calma.-dice Pakku, tratando de que sus compañeros se mantengan alerta.-Aquí al lado tenemos la sala de mandos.
Metida en la roca, sobresaliendo un poco de ella, una gran sala llena de gente, artefactos y paneles de control aparece a sus espaldas. Zurui echa un vistazo, a través del cristal de la única puerta que accede a su interior. Un buen número de efectivos técnicos, unos sentados frente a extensos y alargados paneles, plagados de botones, y otros, de pie, carpeta en mano, con batas azul celeste, dan vida a toda la instalación mecánica y energética de la base. Los que mas llaman la atención del zorro-humanoide son un grupo que se encarga de inspeccionar unos tubos, amarillos fluorescentes y brillantes, que aparecen desde el suelo, y parecen proceder del exterior de la sala, mas concretamente de aquellos extraños generadores con los que se toparon nada mas entrar en la base. Los tubos acaban perdiéndose dentro de un artefacto cuadrado, con varias pantallas digitales, donde se adivinan unas cifras muy raras, que parecen contabilizar y controlar la energía de toda la extensión militar.
-Vaya,-habla Zurui.-aquí tenemos el lugar donde va a parar toda la energía de la base...y no parece que utilicen energía eléctrica.
-¡Pero Zurui, ¿qué estás haciendo?!-reprimenda Pakku a su compañero.-¡Saca tu hocico de ahí! ¡Podrían descubrirte!
-¡Malditos estúpidos!-maldice Kostello.-¡Acabarán dándose cuenta de nuestra intromisión por vuestra culpa!
Zurui se aparta rápidamente de la puerta:
-Tranquilos, tranquilos, esos tipos están demasiado ocupados con sus aparatejos como para darse cuenta de nada.
-¿Te has fijado en las telecomunicaciones?-pregunta Plumb.-Podríamos descubrir si saben algo de nosotros.
-Pues no, no me ha dado tiempo...pero tienes razón. Aunque llevemos estas armaduras, exactas a las de los soldados, nuestros transmisores solo son una simple imitación, no funcionan realmente. No podemos saber si nos han descubierto de ningún modo, aunque supongo que si lo hubieran hecho ya hubieran dado la alarma y veríamos soldados moviéndose por todas partes.
-Eso es cierto, pero aún así debemos ser cautelosos al cien por cien.-indica, de nuevo, Pakku.
Kenchi llega volando frente a Brute y sus hombres, y se posa en el suelo, frente al grandullón:
-Brute, el viejo Jinma ha detectado cuatro presencias extrañas en esta posición. ¿Has visto algo fuera de lo común?
-¿Cómo? No, por aquí no ha ocurrido nada extraño.-contesta Brute.
-Hum...lo que suponía, kukuku...Ese viejo ya chochea. Bueno, de todas formas echaré un vistazo por los alrededores, solo para asegurarme.
Kenchi se dispone a alzar de nuevo el vuelo, pero, justo antes de salir volando, dos soldados llaman su atención desde el final de la cola:
-¡Oiga, señor Kenchi!-dice uno.
-¿Humm?¿Qué pasa?
-Verá,-dice el otro soldado.-hace unos minutos llegaron cuatro soldados muy extraños.
-Si,-vuelve a hablar el otro soldado.-me pareció un poco raro que llegaran tarde, pero no le dimos mucha importancia.
-¡¿Cómo?! ¡¿Qué no le disteis importancia?!-contesta Kenchi algo exasperado.
-No, señor...llevaban las armaduras del ejército, por eso, creyendo que eran de los nuestros les dijimos que siguieran nuestro ritmo, simplemente.
-Lo que nos llamó la atención fue que uno de ellos parecía llevar una mochila colgada al hombro...
-¿Y dónde están ahora esos cuatro exactamente?-pregunta Kenchi.
-Pues hace un momento estaban aquí.-contesta uno de los dos soldados.-Pero han desaparecido, por eso, en cuanto usted nombró lo de las cuatro presencias, enseguida los echamos en falta.
-Grrr...-gruñe Kenchi.-¡No me digáis que se os han colado cuatro tipos y ni siquiera os habéis dado cuenta!
-Nos acabamos de dar cuenta, señor.
-¡Sois unos desgraciados! ¡Mierda, al final va a tener razón ese vejestorio! Brute, tu deberías haber estado al tanto, en vez de andar todo el rato canturreando pamplinas.
-Pe...pero nosotros estuvimos alerta...-sostiene Brute.-¿Cómo nos íbamos a imaginar que alguien se atrevería a entrar disfrazado?
-Si, es un poco absurdo, pero..¡Mierda!...Tú quédate aquí,-encomienda a Brute.-y esta vez abre bien los ojos. Yo voy a dar una vuelta a ver si los encuentro.
-No deben andar demasiado lejos, señor.-indica uno de los soldados.-Hace unos minutos seguían aquí.
Kenchi empieza a elevarse en el aire, justo a treinta metros del suelo. Desde esa posición agudiza su vista todo lo que puede, y mirando detrás de la sala de entrenamiento de los brujos, rápidamente encuentra su presa. Entonces dice:
-Kuku, es verdad, no andan muy lejos.
Seguidamente, sale disparado hacia allí, cortando el aire a toda velocidad.
Pakku y los demás siguen sin ser conscientes de que han sido detectados, y prosiguen con su misión:
-¿Ahora qué hacemos?-pregunta Plumb.
Sin tiempo para ser contestada, la pregunta del pequeño pirata se disuelve con una fuerte brisa de aire venida desde sus espaldas. Pensando que se trata simplemente de una ráfaga de viento, nuestros amigos no se sorprenden hasta que oyen la voz cacareante de Kenchi tras ellos:
-Vaya, vaya, vaya...Aquí tenemos a las ratas que se han colado en la base. Kukuku, no parecéis gran cosa. Así que este era el "gran presentimiento" del viejo. Kukuuuu. No merece la pena ni dar la alarma.
-¡¡¡¡¡¡¡UAAAAAAAAH!!!!!!!
Plumb y Kostello gritan. Pakku y Zurui, aunque sorprendidos, mantienen la calma.
-¡Ese es Kenchi, uno de los miembros del comando de defensa de Pepper!-grita Zurui.
-¡¿Cómo nos han descubierto?!-exclama Pakku.
-¡No lo sé, pero yo me voy de aquí echando leches!-dice Kostello mientras sale escopeteado en dirección a las barracas de los soldados.
-¡Tonto, en esa dirección están los otros soldados!-grita Pakku.
-¡Ahí os quedáis!-responde Kostello.
-¡Maldito cobarde! ¡Rápido,-reacciona Pakku.-corramos!
Los tres piratas salen corriendo, en dirección a un estrecho callejón, entre la sala de entrenamiento de los brujos y el edificio contiguo; la sala de tiro.
-Kukuku. Estos bastardos son patéticos, creía que opondrían resistencia y en vez de eso echan a correr.-dice Kenchi.-Primero me merendaré a esos tres y después me entretendré con el otro.
Desde las alturas, el grupo de Andira sigue espectante los acontecimientos de la base:
-¡Mierda, lo sabía!-exclama Goku Jr.-¡Los han encontrado!
-No es posible. ¿Cómo lo habrán hecho?-se pregunta Abok.
-¡Os lo dije,-les recuerda Goku.-esos tipos saben captar la presencia de las personas! ¡Debemos ir en su ayuda!
Andira observa con detenimiento la situación y dice:
-No, esperad. No deben saber que nosotros estamos aquí. Podemos aprovechar la situación.
-¡¿Qué dices?!-exclama Goku, mientras Abok también mira a su capataz extrañado.
-Esperaremos un poco y confiaremos en que no los atrapen. Con un poco de suerte llamarán la atención de toda la base y, confiando en que sean lo suficientemente astutos, lograrán escapar. Ese será el momento en que deberemos entrar en acción y robar los planos.
-¡Oh, si, muy bien...que buena idea, Andira!-habla Abok, maravillado por la capacidad analítica y de reacción de su jefa.
-¡Tú estás loca! ¡Ese tipo es mucho mas fuerte y veloz que Pakku y los demás!-informa Goku.-¡Los atrapará enseguida y los matará!
Andira mira a Goku y observa en él una preocupación desmesurada. A pesar de que Pakku sea su amigo, no entiende de donde viene tanta preocupación hacia la misma gente que lo apresó. Entonces vuelve a hablar:
-Está bien. Bajaremos en cuanto podamos. Tú-dice mirando al pequeño saiyano.-y yo iremos a ayudarles. Seremos nosotros los que entretendremos a los soldados. Abok,-dirige su mirada a su compañero.-en cuanto lleguemos al suelo tú irás a buscar a Kostello y os dirigiréis al hangar. Esa será nuestra única oportunidad para conseguir los planos.
-Pe...pero...-balbucea Abok.
-No te preocupes,-le dice Andira.-no tardaremos demasiado en rescatarles. Nos reuniremos enseguida con vosotros.
-Está bien, jefa.
-Bueno,-Andira se dirige de nuevo al joven Goku.-ha llegado el momento de que me demuestres hasta que punto me sería difícil vencerte.
Goku Jr. capta enseguida la indirecta.
Korto, que anda mas alerta desde que el viejo le llamó la atención, acaba de captar dos presencias en lo alto de la fortaleza de piedra. Justo en ese momento el anciano Jinma vuelve a comunicarse con él mentalmente:
-[[[Korto, al parecer Kenchi ya ha dado con el paradero de los intrusos.]]]
-[[[Si, mi señor...pero no es solo eso.]]]
-[[[¿Qué quieres decir?]]]
-[[[Acabo de notar otras dos presencias en lo alto de la fortaleza, en la misma situación donde percibimos las cuatro anteriores.]]]
-[[[Muy bien, no esperaba menos de tí, Korto, veo que has estado al tanto. Ya me parecía extraño que tan solo cuatro individuos se hubieran atrevido a insultar nuestra base.]]]
-[[[Me ocuparé de todo rápidamente, señor Jinma. Yo y Brute nos encargaremos de esos dos.]]]
-[[[Me parece bien. No hace falta remover a los soldados para capturar a unos cuantos ineptos. Aún así daré la orden a la división aérea para que inspeccionen los alrededores de Pepper, por si hubieran mas grupos intentando acercarse a la base.]]]
Korto, súbitamente, desaparece frente a los arsenales de los brujos.
Pakku, Zurui y Plumb siguen corriendo en el interior del estrecho pasillo que se abre entre los dos edificios. Kenchi, volando a la altura de los dos tejados, les sigue muy de cerca:
-¡Madre mía, ese aguilucho es mucho mas rápido que nosotros!-dice Pakku.
-¡Si, hasta parece que nos de ventaja!-resalta Plumb.
-¡Pues claro que es mas rápido,-grita Zurui.-él vuela y nosotros no!
-¡No se me ocurre como podemos salir de ésta!-informa Pakku.
-¡Jefe,-dice Zurui aminorando su velocidad.-tu guarda las energías y sigue corriendo!
-¡¿Qué vas a hacer?!-pregunta Pakku.-¡No seas loco!
Zurui escarba en su zurrón y saca una esfera del tamaño de una Dragon Ball, de color rojo chillón, con tres pequeñas iniciales a un lado; MGC. El zorro para en seco y dice:
-Bien, ha llegado el momento de utilizar estas piedras, *Kary, de ver cuan poderosos son estos hechizos.
A pesar de que no se encuentra lo suficientemente cerca, su aguda visión le permite a Kenchi adivinar el objeto que su presa acaba de sustraer. Pero aún así, Kenchi no acaba de creer lo que ven sus ojos:
-¿Qué es eso? ¡No puede ser que sea...!
Sin darse cuenta, Kenchi se ha acercado demasiado a su presa. Se encuentra a nueve metros de Zurui, lo suficiente para que nuestro zorro considere que ha llegado el momento de utilizar su piedra:
-Bien, solo tengo que concentrarme en esta piedra y...
Sin tiempo para mas, Zurui lanza fuertemente la esfera hacia Kenchi. En el aire, la esfera se convierte en una gran bola de fuego, a punto de chocar contra el rostro del esbirro del Imperio. Kenchi, en el último segundo, consigue esquivar, a malas penas, el temible hechizo de fuego que atentaba contra su saludable forma física, obligándole a cesar, momentáneamente, su persecución. La piedra incandescente choca contra la pared de la sala de tiro, creando un manto de llamas en toda la extensión que toca. Al perder velocidad y caer al suelo, la esférica piedra pierde su fulgor y el color la abandona para pasar a ser transparente.
Sin perder un segundo, Zurui pulsa una zona de su armadura, en el centro del pecho. De pronto, BOOOM, una explosión, acompañada de humo, precede a la aparición de la MG Transformable (MGT), que originalmente era esa armadura. El zorro vuelve a coger la MGT y la lanza contra el suelo, haciendo que gire y provoque una considerable humareda. Entonces Zurui salta en el aire, BOOOMB, y se convierte en una moto aérea, dirigiéndose a toda prisa hacia sus dos compañeros.
Al mismo tiempo Kenchi se repone del susto, mira atrás y divisa el objeto que le ha sido lanzado. Entonces se da cuenta de que no puede ser otra cosa mas que:
-¡¡Una **Magic Gu Cargable!!-exclama totalmente sorprendido.-¡No puede ser! ¡Pero si solo hace un par de meses que esas piedras se pusieron en funcionamiento! ¡Además, solo se les está permitido el uso a los miembros del Imperio!
Kenchi no se explica como un objeto tan peligroso y altamente betado a los civiles, ha caído en manos de uno de los intrusos. Cavilando, Kenchi saca sus conclusiones:
-¿Será que alguien de Magic Gu nos ha traicionado? No puede ser, no les conviene en absoluto. ¡Quizás se haya filtrado algún ejemplar en el mercado! ¡Si, debe ser eso! ¡Si se tratara de la misma empresa Magic Gu, no se habrían molestado en proveernos de sus últimos avances en armas mágicas! Aún así ese hechizo ha durado demasiado como para haber sido cargado por un principiante...-Kenchi vuelve en sí.-Kukuku...malditos desgraciados escurridizos, realmente me habéis impresionado.
Cuando se quiere dar cuenta, sus perseguidos ya no están dentro del callejón.
-Brute,-Korto aparece de la nada frente al monstruoso gigantón.-manda a tus hombres a ayudar a Kenchi. Tú y yo nos quedaremos aquí.
-¡Ah, Korto! ¿Qué ha pasado? ¿Ha encontrado Kenchi a los intrusos?
-Si, y parece que hay mas ahí arriba.-Korto señala a lo mas alto de la pared de roca.
-Vaya, no es justo, siempre soy el último en enterarme de todo.
-Si prestaras mas atención tú también podrías aprender a captar la presencia de los demás.
-Juju, ya sabes que soy muy torpe para eso.
-Bien, pues haz lo que te he dicho.
-Si, de acuerdo. Vosotros,-dice Brute dirigiéndose a la treintena de hombres, situados a sus espaldas.-id a ayudar a Kenchi. Ya habéis visto a donde se dirigía.
-¡Si, señor!-dicen sus hombres.
-Parece que ha habido algún altercado en la zona de la sala de tiro.-informa Brute.-Se ha visto un fogonazo proviniente de allí.
Todos los soldados toman rumbo desde las barracas hacia la zona de la sala de operaciones. Korto no aparta la mirada del cielo, como esperando que algo baje hacia ellos. Entonces dice:
-Brute, coge tu mejor arma y estate dispuesto. Tan solo percibo dos presencias, no demasiado poderosas, pero nunca se sabe.
-Si, dejé mi guadaña favorita en uno de estos arsenales, por si acaso. Voy a por ella.
Desde el otro lado de la sala de tiro Pakku, Zurui y Plumb se asoman hacia el callejón que acaban de abandonar, sin darse cuenta de que el enemigo les vigila desde las alturas:
-¿Dónde está?-pregunta Plumb.
-No lo sé.-responde Pakku.
Donde había estado Kenchi solo queda una humareda.
-¡No seáis tontos!-exclama Zurui, recién devuelto a su forma normal.-¡Ese tipo es Kenchi, el encargado de las fuerzas aéreas de la base, ¿dónde creéis que puede estar?!
La pregunta con retuntún de Zurui hace que sus compañeros echen la vista al cielo, pero la oscuridad del firmamento no les deja adivinar ninguna forma mas allá de una cierta distancia.
-Mierda, si está en el cielo no podemos ver nada.-dice Plumb.
-¡Buena observación, pequeño, pero nuestra vida corre peligro! ¡Debemos salir de aquí o acabaremos fritos!
Desde las alturas, y oculto en la oscuridad, Kenchi se dispone a proceder con su siguiente ataque:
-Kukuuu. Bien, es momento de tomarse las cosas un poco mas en serio. Esos mamíferos desvalidos han resultado ser mas astutos de lo que pensaba, así que aprovecharé para probar mi nueva arma.
Kenchi posa su mano derecha sobre un aparato alojado en su antebrazo izquierdo, un arma en forma de pequeño cañón. En su extensión, por la parte de abajo, tiene tres botones.
-A ver, espero que funcione tan bien como en las pruebas de esta tarde. Probaré la ráfaga persecutoria. Se presionaba el botón-pulsa el mas cercano al brazo.-y despúes mentalmente el arma reacciona a mis impulsos.
Tras esto Kenchi se sitúa justo detrás de ellos, a unos siete metros de distancia y flotando a varios metros del suelo. Mientras, nuestros amigos piensan en como escapar:
-¿Qué hacemos, salimos corriendo hacia la entrada?-pregunta Plumb.-Nos han descubierto, ya no tiene sentido que sigamos con la misión.
-¿Y cómo vamos a salir? No creo que nos abran las puertas, lo mejor es salir volando hacia un costado.-dice Zurui.
-Pero nosotros no podemos volar.-aclara Plumb.
-Yo puedo convertirme en un sky-car o en cualquier otro vehículo volador, el problema es que, aunque me transforme, mi fuerza sigue siendo la misma. No podría llevaros a los dos a la vez.
-¿Dónde se habrán metido Goku y Andira?-pregunta Pakku para sí.
De pronto una fuerte brisa de viento vuelve a acariciar sus espaldas, trayendo consigo un cacareo familiar, que se les hace el sonido mas terrorífico que han escuchado en sus cortas vidas:
-KUKUKUUU.
Los piratas, sin poder evitar un fuerte sentimiento de terror, estremecidos, giran su cabeza, solo para toparse de bruces con el pánico que supone que un soldado del Imperio te apunte con un arma. No hay tiempo para mas discusiones. En esos momentos sus piernas comenzaron a correr hacia ningún lugar, poseídas por uno de los mas básicos instintos que todo ser viviente posee. Sin pensar en nada, simplemente intentando salvar sus vidas.
El mini-cañón de Kenchi muestra dos nuevos orificios a los lados y, al grito de "¡Es inútil que huyáis! ¡Tomad esto!", empiezan a lanzar innumerables hebras de energía, que comienzan a perseguir a nuestros tres piratas. "¡¡¡Corred con todas vuestras fuerzas!!!" grita Pakku, un grito que llega un tanto tarde para uno de sus dos compañeros. Uno de los finísimos hilos de energía atraviesa el corazón de Plumb, seguido de otros tantos que atraviesan sus piernas, su estómago y uno de sus brazos. Pakku y Zurui miran atrás sin dejar de correr, solo para ver como el cuerpo sin vida de su pequeño amigo se desploma en el suelo:
-¡¡¡¡¡PEQUEÑAJOOOOOO!!!!!-grita el zorro haciendo un amago de volver atrás.
-¡¡No!!-grita Pakku.-¡¡Ya no podemos hacer nada!!
-¡Toma, uno menos! Kukukukuuu...mira como corren. ¡No sabía que esto podía ser tan divertido! Estos de Capsule Corporation fabrican unos juguetitos muy interesantes.
La ráfaga de rayitos de energía sigue persiguiéndoles, tan solo pararán cuando alcancen su objetivo y, mientras tanto, Goku Jr., Andira y Abok se disponen a bajar a la base, sin saber que allí tendrán que verse las caras con la fuerza descomunal de Brute y con el misterioso y despiadado Korto.
GLOSARIO DE TÉRMINOS:
*Kary:
Éste es un personaje de la historia "Escuela de transformaciones (EDT)", creada por Ismael Esquinza, en el grupo DRAGON BALL 2nd EPOQUE en Hi5. Esta historia es una especie de precuela de DRAGON BALL 2nd EPOQUE, ya que entra dentro de su universo y está situada cronológicamente antes de los hechos de nuestra 2nd EPOQUE. Aunque los hechos que la relacionan con la escena aquí descrita aún no han aparecido en dicha historia (EDT), lo harán en el futuro, para ello se debe seguir y leer "Escuela de transformaciones" (by Ismael).
**Magic Gu Cargables (MGC) (también llamadas MG Transparentes):
Estas Magic Gu tienen la capacidad de absorber un conjuro para ser utilizado mas tarde, incluso un brujo experimentado podría cargar un buen puñado de piedras para que las utilicen los soldados menos experimentados. O simplemente podrían ser utilizadas por un brujo para poder lanzar varios conjuros simultáneos y no perder tiempo. Estas Magic Gu son transparentes, osea, como si estuvieran vacías, y cambian de color dependiendo del hechizo que se cargue.
Cuando se utiliza una Magic Gu Cargable que contiene un hechizo lo que se debe hacer es concentrarse en la piedra (para activar el conjuro) y lanzarla al enemigo. La Magic Gu se convertiría en el hechizo cargado y volvería a ser una piedra transparente segundos después, cuando pierda el efecto del conjuro. Aunque si el individuo que la intenta cargar no tiene ningún poder mágico, no le valdrían de nada, a no ser que ya estén cargadas con algún hechizo de algún ser con capacidad mágica, entonces podría lanzarlas si, como mínimo, consigue concentrarse lo suficiente para activar el hechizo.
Las Magic Gu Cargables son peligrosas en la medida de la potencia del conjuro cargado, por eso si el que carga el hechizo es un brujo poderoso, y se emplea a fondo en cargar la Magic Gu, estas piedras pueden ser de las mas peligrosas. También una misma MG Cargable podría ser recargada cuantas veces se quiera, siempre y cuando se consiga recuperarla después de ser utilizada.
Estas Magic Gu son una variedad de las llamadas MG Especiales, y son de las mas difíciles de fabricar y, por tanto, de las mas difíciles de conseguir. Fueron creadas como armas a petición del Imperio (aunque no sabemos si ya existía algún prototipo antes) y tan solo el Imperio puede disponer de ellas con total libertad, mientras que un civil solo podría conseguirlas, muy, muy, muy raramente, en el mercado negro.
CAPÍTULO 20: SIN PODER EVITARLOAntes de lanzarse abajo, nuestros "piratas de las alturas" reciben una terrible noticia:
-¡Mierda! ¡Una de las tres energías ha desaparecido!-dice Goku.-Ha caído uno de los nuestros.
-¡¿Cómo?!-exclama Abok.-¡¿Quién ha sido?!
-Ha sido el mas jovencito...ese taaal...
-¡Plumb!-dice de nuevo Abok.
-Si, ese.
-Pobrecillo...
-Has dicho "tres energías".-incide Andira.
-Si, las del grupo de Pakku.
-¿Y qué hay de Kostello?-pregunta la pirata.
-Ah, él se ha separado del grupo. Se ha escondido entre esos edificios.-dice Goku Jr. señalando las barracas de los soldados.
-Muy propio de él.-interviene Abok.-Es un monstruo del escapismo.
-¡Vamos abajo!-exclama Goku algo alterado.-¡No voy a dejar que Pakku y los demás mueran también!
-¡Si, vamos!-ordena Andira.
Andira coge a Abok de los brazos y se lanza hacia el interior de la base, seguida por Goku. Mientras, Brute ya ha llegado con su gigantesca guadaña, una guadaña negra, con un filo reluciente y afilado. Con un mango de formas grotescas pero a la vez sofisticadas, un arma forjada en el mismo mundo de los demonios. En ese justo momento todos los soldados de la base se percatan de que algo sucede, han visto las llamaradas que casi alcanzan a Kenchi. Todas las torres de vigilancia y los vehículos aéreos posan su atención en esa zona, desde la sala de mandos, metida en la roca, la misma que Zurui oteó momentos antes, se manda un mensaje hacia el hangar principal:
-Señor Jinma-comienza a hablar, con tono radiofónico, un panel lleno de botones.-parece que hay disturbios en la zona de la sala de tiro. ¿Mandamos efectivos a esa zona?
Jinma se acerca al panel para decir:
-No, solo son cinco o seis insensatos. Korto, Brute y Kenchi ya se están encargando del asunto, por ahora mandad a las tropas aéreas a inspeccionar los alrededores, podrían haber mas desgraciados de esos rondando por ahí.
-Si, señor, así se hará. Le mantendremos informado.
Entonces Jinma se dirige a Korto:
-[[[¡Korto!]]]
-[[[¿Si, señor Jinma?]]]
-[[[Quiero que dejéis a uno de los intrusos con vida. Vamos a descubrir quien ha sido tan estúpido como para intentar burlarse de la Base Pepper.]]]
-[[[Eso no será problema. Yo mismo me ocuparé de ello señor.]]]
-[[[Bien.]]]
Brute mira a Korto con extrañeza, aunque no puede oír la conversación mental, sabe por la expresión de su compañero que hay nuevas noticias del jefe:
-¿Qué ha dicho el viejo?-pregunta.
-Debemos atrapar a uno de los intrusos con vida.
-¿Y eso para qué?
-No seas ignorante. Tenemos que averiguar quien está detrás de esta intromisión.
-Ah, si, si, claro...¿Cómo no lo había pensado? Etonces contendré un poco mi ataque.
-Si, aunque no me fio de tí, eres demasiado desmesurado en tus golpes.
Antes de que Korto pueda seguir hablando, empiezan a verse dos siluetas cayendo desde lo alto de la roca.
-Aquí les tenemos.-dice Korto.
Andira, Abok y Goku Jr. aterrizan justo frente a ellos.
-Vaya, son tres en vez de dos. Te has equivocado, Korto.
-Ummmm, es muy extraño, solo capto dos presencias.
"¿Quién será esa chica?" piensa Korto no pudiendo captar la presencia de Andira, "no desprende ninguna energía". Andira, Goku y Abok hablan entre ellos:
-Parece que nos esperaban.-dice Andira.
-Claro, ya os lo dije, pueden captar nuestra energía.
-Otra vez con lo mismo.-se queja Abok.-A mí háblame en un idioma que entienda.
-¿Quién sois vosotros?-interviene Korto.
Tras unos segundos de silencio, Goku contesta:
-Dejad en paz a nuestros compañeros.
-¿Te refieres a esos cuatro disfrazados como nuestros soldados?-pregunta el menudo comandante.
-Si. Dejadlos y nos iremos tranquilamente.
-Lo siento, pero tus compañeros y tú habéis cometido un acto de alta traición al entrar aquí sin permiso.
-Nos perdimos y llegamos aquí.
-¡¿Qué?! ¡Jajajajaa! ¿No pretenderás en serio que me crea eso?
-Jujuju,- ríe Brute.-ni siquiera yo me lo he creído.
-¿Y entonces por qué tus compañeros ivan vestidos con las armaduras de nuestros soldados?
Andira, harta de la conversación dice:
-Kostello y los demás están en peligro, no tenemos tiempo y éstos no nos dejarán ir de ninguna manera.
Goku intenta evitar la lucha, su misión corre peligro si descubren su potencial, pero Pakku es su amigo:
-Está bien.-dice nuestro mestizo saiyano.-Yo me encargaré del mas bajito.
-Jaja, que espabilado.-dice Abok.-Y el mas grande para nosotros.
-No, tú irás a buscar a Kostello.-ordena Andira.
-¿Cómo? Pero no puedo dejarte sola...
-Me las arreglaré.-su tono contundente y seguro convence a su pirata de ipso facto.
-Bien.-acata la orden.-Dijisteis que andaba por aquí, ¿verdad?
Abok se dirige hacia las barracas de los soldados, pero Brute rápidamente se interpone en su camino.
-¿De veras creéis que os vamos a dejar pasar como si nada?
El descomunal comandante alza su guadaña y propina un tajo dirigido a nuestro pirata. Pero el golpe es interceptado por Andira, que con su antebrazo logra parar la tremenda hoja del arma.
-¡¿Cómo?! ¡¿Qué haces tú aquí?!-exclama Brute haciendo fuerza con su arma sin apenas resultados.
La respuesta de la pirata es inmediata: una fugaz media luna acaricia levemente el desnudo torso de Brute. Con las puntillas de los pies acaricia su vientre, su pectoral, y acaba impactando, con el pie derecho, en su barbilla, alzándolo en el aire y estampándolo de espaldas contra el suelo.
-¡Ahora! ¡Corre!-grita Andira.
Abok, con un deje de culpabilidad por dejar sola a su superiora, finalmente, echa a correr hacia las barracas:
-¡Si, buscaré a Kostello y nos iremos de aquí!-Abok se pierde entre las viviendas.
Seguidamente, la pirata aprovecha que Brute aún no se ha levantado para agarrarlo de su pierna izquierda. Acto seguido comienza a girar sobre sí misma. Los giros toman una velocidad endiablada, que hacen que el enorme cuerpo del gigantón salga disparado cuando la chica lo suelta, y se estrelle contra una de las barracas, destruyéndola casi por completo.
-Uuuugh, esta niña no es una chica normal.-se incorpora Brute, apenas dañado, quitándose de encima innumerables cascotes y escombros.-¡Mierda, el otro se escapa!
-¡No pasa nada, Brute!-contesta Korto.-Luego iremos tras él. Ahora deja de jugar y ocupémonos de estos dos.
-Uuuumm, si...eso haré.
Los contendientes se analizan los unos a los otros. La decisión de Goku Jr. no ha sido por casualidad, ha decidido enfrentarse a Korto por que ve en él a un adversario mucho mas intenso que el grandullón. Además, Andira está mas acostumbrada a luchar contra enemigos de gran envergadura. Pero Goku deberá vérselas y deseárselas para luchar sin mostrar todo su poder. Lo que por un lado podría ser un buen reto y un incentivo para su espíritu guerrero, por otro es un total inconveniente, teniendo en cuenta la situación precaria en la que se encuentran. Nada de grandes descargas de energía ni de aumentos de poder desproporcionados, el cuerpo a cuerpo es lo mas prudente. Una victoria rápida antes de que el grupo de Pakku acabe hecho fosfatina. Andira, por su parte, ni siquiera se plantea su forma de atacar, su estilo suele fluir durante la lucha, a modo de una suerte de improvisación totalmente intuitiva, y casi siempre elegante y acertada. Nuestra chica es una máquina para la lucha, capaz de actuar en consecuencia en medio de un combate, en cuestión de segundos, concisa, bella. Para ella la lucha no es un placer, sino un modo de vida.
-Entonces tú serás mi adversario.-dice Korto dirigiéndose a nuestro saiyano.-"Este chico también esconde algún secreto."-piensa.-"No logro ver todo su potencial..."
A una distancia de cinco metros, Korto comienza su ataque con un velocísimo movimiento de mano, dirigido a su rival:
-¡FALCON WIND!-grita.
El golpe pilla de improvisto a nuestro saiyano, y la tremenda honda de choque, imperceptible, le golpea en toda la cara, zarandeándola bruscamente hacia atrás, destapándole el rostro y haciéndole retroceder un par de pasos. Pero Goku se repone de inmediato:
-"¿Qué ha sido eso?"-piensa Goku, mientras se recoloca el pañuelo en la boca y vuelve a cubrir su cabeza con el manto.-"¿Un kiai-ho? No, este golpe es muchísimo mas penetrante. Casi daña mis órganos internos. Una persona normal habría muerto en el acto. Debo tener cuidado con este tipo, no es de este mundo."
-Vaya,-dice Korto levemente sorprendido.-así que realmente no eres un chico normal. Has sobrevivido a mi "Falcon Wind" como si nada.
Goku se lanza tras él.
La ráfaga de finos rayos de energía cada vez se acerca mas a Zurui y Pakku, que a pesar de su rabia no dejan de correr. Instantes antes han sido testigos de como un miembro de su equipo moría acribillado.
-No malgastéis energías inútilmente.-recomienda Kenchi, mientras les sigue desde el aire.-Kukuku. Esas mini descargas de ki os perseguirán hasta atravesaros todo el cuerpo. Vais a morir igual, así que, yo de vosotros preferiría hacerme a la idea y morir tranquilo, kukukuuuuuuu.
-¡Ya está, estoy harto!-grita Zurui parando en seco.
-¡No, desgraciado!-exclama Pakku volviendo la cabeza hacia atrás.-¡No le hagas caso!
La ráfaga, llega a escasos centímetros del zorro, pero Zurui ni se inmuta. De pronto BOOOOM, cortina de humo, y una enorme y gruesa placa de acero recibe todo el impacto de la descarga persecutoria.
-¡Ostras!-Pakku queda inesperadamente sorprendido.-¡Zurui ha parado la descarga!
BOOOOM de nuevo y Zurui vuelve a su verdadera forma y, veloz, vuelve a coger el ritmo de Pakku.
-¡¿No dijiste antes que aunque te transformaras tenías la misma fuerza?!-pregunta Pakku mientras corre.
-¡Si, pero *no es lo mismo la fuerza que la consistencia! ¡Además, el golpe me ha dolido bastante!-responde Zurui, aquejado, mientras acaricia su pecho.
Kenchi no sale de su ensimismamiento al ver como un simple zorro ha sido capaz de repeler su ataque.
-Mira tú por donde...ese cuadrúpedo de mierda puede transformarse. Parece que posee algún tipo de poder mágico.-Kenchi mira el arma alojada en su brazo.-Provaré con otra aplicación del aparatejo este...
Sin darse cuenta, Pakku y Zurui han llegado a un pequeño callejón, entre la torre de vigilancia cercana a las barracas y la sala de entrenamiento de la divisón de brujos. Justo en ese momento, desde las barracas, empieza a acercarse el pelotón de Brute.
-¡¿Por cuánto tiempo vamos a seguir corriendo jefe?!
-No se...Arf, arf...-jadea.-Pero deberíamos hacer algo pronto. Empiezo a escuchar voces...Parece que los soldados de antes se acercan hacia aquí.
-Escucha, tengo una idea...jefe.
Los soldados discuten acerca de lo ocurrido mientras caminan acelerados.
-¿Cómo es posible que se nos colaran esos intrusos?-dice uno.- Parece mentira...y justo hoy.
-Pues es verdad-dice otro.-...y encima de una forma tan absurda.
-Dejadlo estar.-contesta otro mas.-Ahora debemos ayudar al comandante Kenchi.
-Jaja.-ríe otro.-Como si a los comandantes les hiciera falta nuestra ayuda.
-No se trata de eso.-replica el anterior soldado.-Debemos salvar un poco nuestro orgullo. Menuda reprimenda le ha caído al comendante Brute por nuestra culpa.
-Si, eso si es verdad.
De pronto, desde la esquina de la torre que mira hacia las viviendas militares, Kenchi aparece con cara de pocos amigos:
-¡¡¡¿Pero qué demonios hacéis aquí?!!!-chilla el comandante, histriónico.-¡¡¡Uno de los intrusos ha tomado mi forma y está revoloteando por los tejados!!! ¡Corred a por él y no dejéis que escape!
-¡Ah, lo sentimos, señor!-contestan los soldados.
-¿Dónde se encuentra exactamente el intruso,-pregunta uno de ellos.-mi señor?
-¡¡Por allí!!-dice señalando al tejado de la sala de operaciones.-¡¡Id a por él inmediatamente!!
-¡Si, creo que ya le veo!-dice uno de ellos pulsando un pequeño botón de su casco, que despliega una visera azul sobre sus ojos, permitiéndole ver en la oscuridad.-¡Está flotando en el aire! ¡Vamos allá!
-¡¡¡Si!!!-gritan entusiasmados todos los demás, no viendo el momento de redimir su grandísima falta.
Mientras los soldados corren y pasan de largo a su comandante, Kenchi vuelve por donde ha venido, salta en el aire, BOOOM, y vuelve a su forma zorruna.
-La leche.-exclama Pakku.-Es una suerte que no me hayan visto al pasar.
-Bueno, jefe, tenemos dos opciones. Salir huyendo o-pausa.-...aprovechar esto para vengar a Plumb.
-Humm...
Brute levanta su guadaña, con una fuerza tal que la onda expansiva de su movimiento alza en el aire los pequeños cascotes que se encuentran a su alrededor. Sus embestidas son brutales, pero no encuentran a su objetivo. Andira se desliza entre la riada de mandobles, esquivando todos y cada uno de los sablazos.
-¡Urrrgh! Eres muy rápida,-admira Brute.-pero no podrás seguir esquivándome así por mucho tiempo. En cuanto tus fuerzas flaqueen te partiré en dos.
Andira no vacila, con su pie derecho desvía la guadaña a un lado y, haciendo gala de una elasticidad sobrehumana, machaca la mandíbula de su enemigo con la planta de su pie izquierdo, haciéndole escupir sangre. Sin embargo Brute es un excelente guerrero y, además, muy resistente. Se recupera enseguida y golpea con su cabeza la nuca de la pirata, estampándole la cara contra el suelo.
-Golpeas demasiado fuerte, niña.-dice el gigante, alzándose sobre la abatida fémina.-No pareces una persona normal.
Goku Jr. lanza una sucesión de patadas a su contrincante, pero Korto las esquiva con suma facilidad.
-Ju, me estás decepcionando un poco. Creía que tu rapidez iría pareja a tu fuerza oculta...¿o es que también contienes la velocidad?
El espíritu luchador del saiyano zarandea sus sentidos, haciéndoles entrar en alerta. Acaba de descubrir que su adversario vislumbra algo sobre su verdadera capacidad, así que, antes de que pueda seguir analizándole se pone en marcha:
-¡¡Grooooaaaaarrrrrr!!-Goku concentra energía en su puño derecho, y con su mano izquierda lanza una serie de energy-has, tratando de desestabilizarlo para golpearle.
Korto espera a que las descargas de energía se acerquen, y en el último segundo desaparece. Las energy-ha estallan contra el suelo.
-Parece que te he valorado demasiado,-Korto aparece a la espalda del saiyano.-pero aún así tú y tu amiguita sois una amenaza para el Imperio y vais a desaparecer.-flotando en el aire, posa su mano en la nuca de su adversario y grita:.-¡¡Falcon Wind!!
Goku recibe el fuerte impacto a bocajarro, el dolor es insoportable, sus ojos se nublan y se desploma. Korto desciende y se acerca a él.
-Los humanos sois demasiado estúpidos. ¿A quién si no se le ocurriría venir aquí a dar por saco?
El retaco posa su pie derecho sobre el cogote de Goku, estrujándoselo concienzudamente mientras continúa su berborrea:
-Ahora, ¿me vas a decir qué habéis venido a hacer aquí o prefieres que comience a desmembrar tu cuerpo?
Goku empieza a levantarse, haciendo presión contra la pierna de su contrincante, hasta colocarse a gatas.
-Cabezota hasta la muerte. Muy típico. ¡Si puedes seguir luchando levanta de una vez!
Una patada en el costado da la vuelta al cuerpo de Goku, que sangra por la nariz y por la boca, debido al demoledor Falcon Wind. Goku se levanta de un salto.
-Se nota que no eres de este planeta.-dice Goku mientras limpia la sangre de su rostro con su pañuelo.-Nunca había luchado con alguien que tuviera unas técnicas tan originales.
-Jajajaaa...Originales dice. ¿Qué tipo de comentario es ese?
Goku prosigue:
-Parece que voy a tener que aplicarme mucho mas si quiero derrotarte. Perdona, pero es que hace tiempo que no lucho.
Goku se concentra y un aura de color cielo estalla alrededor de su cuerpo.
-¡Allá voy!-de nuevo nuestro saiyano a la carga, volando a ras de suelo.
Goku, en un segundo, aparece frente a Korto, dejando una estela de aura azulada tras de sí. Su contrario desaparece, pero Goku rápidamente percibe su ki y en un instante aparece a su lado. Su puño derecho brilla con la energía que antes había acumulado, y golpea la mejilla derecha de Korto, haciéndole precipitarse a gran velocidad contra la pared de la base.
-Parece que usas una técnica de teletransporte.-comenta Goku.-Tu energía desaparece durante un instante y vuelve a aparecer justo después.-el joven vuelve a tapar su rostro con su pañuelo y el manto roído.-Ahí tienes mi velocidad.
Zurui vuelve a saltar hacia atrás. La explosión, la cortinilla de humo, y frente a nostros aparece un inmenso y vigoroso águila real.
-Jefe, hagámoslo como hemos dicho.
-Si, nos arriesgamos demasiado, pero no podemos dejar estar así como así la muerte de Plumb.
Zurui echa a volar en dirección a la superficie de la susodicha sala de operaciones. Pakku sale corriendo hacia la parte trasera del mismo edificio, cuya parcela no es otra cosa que la sala de entrenamiento de los brujos. Entre tanto, Kenchi trastea su aparato.
-A ver, este botón es para generar una descarga de energía al máximo. Kukuku, si, eso haré. Los desintegraré de un plumazo.
Antes de que el monstruo volador pueda salir al encuentro de sus presas un disparo casi le roza la cara.
-¿Pero qué...?-echa su vista al suelo y ve como sus propios hombres le atacan.-¡¿Pero que tontería es esta?! ¡¿Que hacéis disparándome?!
-¡No nos vas a volver a engañar, intruso,-grita uno de los soldados.-sabemos que puedes tomar la forma de otros seres!
-¡¿Pero qué gilipollez estáis diciendo?!
-¡Baja de ahí ahora mismo o te freímos!-avisan.
-¡¡Que os calléis y busquéis a esas ratas!!
-¡¡Fuego!!-ordena uno de ellos.
-¡¡¡Kukuuuuuuk!!!
Los soldados empiezan a ametrallar a su superior, obligándole a ascender en el aire.
-¡¡Apuntad mejor, que no escape!! ¡¡Lanzadle todo lo que tengáis!!
-¡¡**Demonios colorados!!-dice Kenchi mientras asciende aún mas y coloca su mano derecha sobre su mini cañón.-Me van a obligar a lanzar sobre ellos la descarga máxima.
Kenchi apunta hacia sus hombres, pero justo antes de apretar el botón un par de enormes garras se adieren a su arma como un niño a su golosina favorita.
-¡¿Qué...qué es esto?!-pregunta el comandante, cuyas gotas de sudor se hacen presentes en su rostro.
Las garras, que no son otra cosa mas que el águila en el que se ha convertido el zorro, no sueltan su brazo, sino que tiran de él intentando arrebatarle el arma. Al mismo tiempo la lluvia de disparos continúa desde el suelo.
-¡¡Quita de aquí, animalucho!!-grita Kenchi, forcejeando sin mucha suerte.
Zurui tira de su adversario y lo lleva aún mas arriva en el cielo. Con un último movimiento brusco, el fulgoroso ave consigue desproveerlo de su mini cañón.
-¡¡Joder, kuuuuk, devuélveme eso, bestia!!
El águila aún vuela mas alto, unos cinco metros mas, y para en seco, moviendo sus alas para mantenerse en el aire.
-Jujujuuu...¿ahora qué vas a hacer sin tu juguetito, bazofia del Imperio?-provoca Zurui.
-¡¡Eres tú!! ¡¡¿Donde estás? ¿De veras pretendes enfrentarte a mí desde el aire?-sin darse cuenta, Kenchi ha subido tan alto en el cielo que la oscuridad no le deja ver a su adversario.-¡¡Devuélveme mi arma ahora mismo!!-berrea patéticamente fuera de sí.-¡¿Sabes lo que le pasa al que roba al Imperio?!
-Vaaaaya,-se burla el zorro.-parece que a pesar de tener cara de pajarraco tu visión deja mucho que desear. Siendo así, ¡ahora verás!
El aguila gira hacia atrás, sobre sí mismo, y Zurui se convierte en un gigantesco búho.
-Yo, al contrario,-prosigue con la burla.- parece que ahora voy a verte perféctamente...Juju...Y eso que de niño apenas comía zanahorias.
-¡¡Que me devuelvas esoooo!!-grita Kenchi dirigiéndose hacie el lugar de donde procede la voz.
-Pero mira que eres cansino.-dice con toda la pasimonía del mundo, mientras le esquiva fácilmente.
Entonces una bala alcanza el brazo derecho del comandante.
-¡¡Aaaaaargh!! ¡¡Esos estúpidos!! ¡¡Cuando baje se van a enterar!!
-¿Quieres bajar?-aparece el búho, agarrándolo del brazo herido con una de sus zarpas.-¡¡Pues baja!!
Frenéticamente Zurui empieza a descender a toda velocidad.
-¡¡¿Qué haces?!! ¡¡AAAGH!!-las uñas del búho urgan en su herida.-¡¡Suéltame o lo vas a pagar caro!!
-¿Sabes?, no deberías haber matado a ese niño.
-¡¿De qué me hablas?! ¡Suéltame!
-Aún era muy joven, ¡¡¿sabes?!!-el tono del zorro estalla.-¡¡¡Pero era el pirata mas valiente que he conocido!!!
-¡¡¿Qué...?!! ¡¡¿Piratas...?!!!
Zurui aumenta su velocidad, cegado por la ira, tanto que hasta una bala le roza la mejilla. A escasos metros del tejado de la sala de operaciones nuestro zorro grita:
-¡¡Ahora, jefeeeee!!
Zurui suelta a Kenchi, que intenta sobreponerse, pero la alta velocidad y el dolor del brazo se lo impiden. Cuando está a punto de chocar, en el tejado, de la nada, aparece Pakku, que de un salto y con sus dos manos entrelazadas, golpea al esbirro del Imperio con todas sus fuerzas.
-¡¡ESO VA POR PLUMB, BASTARDO!!
El brutal impacto quiebra el brazo herido de Kenchi, y lo hace chocar contra el tejado de la sala de operaciones, atravesándolo. Tan solo el suelo macizo de la sala para la estrepitosa caída del comandante.
-¡¿Qué ha pasado?!-pregunta un soldado.
-¡No me ha dado tiempo a verlo muy bien,-contesta otro.-pero parece que el comandante Kenchi ha caído!
-¡¿Cómo?!
-Si, parece que esos tipos lo han cogido y lo han lanzado.
-¡Vamos a socorrerle!
Zurui aterriza en el tejado, junto a Pakku, y vuelve a su estado normal. Entonces su jefe le dice:
-Bufff. Nos ha salido mejor de lo que esperaba.
-Si, y mira lo que he conseguido.-el zorro muestra el arma de Kenchi.
-¡Uoooh, eso es el aparatejo ese raro del monstruo!
-Si, es un arma muy extraña...No la reconozco.
-A ver.-Pakku la examina y señala en la parte trasera del arma.-Mira, aquí lleva el logo de Capsule Corp.
-Quizá sea una de esas armas nuevas que nos dijo el Gran Youmaoh.
-Si, ¿pero desde cuándo Capsule Corp. fabrica este tipo de armas?
-Ese pajarraco no tardará mucho en subir aquí.-cambia necesariamente de tercio Zurui.
-¡¿Cómo?! ¡¿Despúes de la que se ha llevado?!
-Me he dado cuenta de que ese tipo es muy fuerte. Podría cargarse a un ejército él solo. La verdad es que hemos tenido mucha potra. El pillarlo desprevenido ha sido nuestra mayor baza.
-Bien, pues en ese caso-Pakku alza el minicañón a la altura de sus ojos.-...vamos a provar este artefacto.
Andira continúa su batalla. Por culpa de los golpes el manto ya no cubre su cara. Brute sigue intentando cortarla sin éxito.
-¡¡HAAAA!! ¡¡HIAAA!!-grita el comandante con cada embestida.-¡¡¿Qué pasa, arf, arf...solo esquivas...arf...?!! ¡¡¿Quiéres agotarme?!! ¡¿Es eso?!
Andira no habla, solo continúa esquivando.
-Pues bien...-Brute cierra los ojos y coloca su guadaña a la altura de su nariz, extendida de arriba abajo.-¡¡¡Buuuuuffffff...haaaaa!!!-se tranquiliza.-A veces puedo ser un estúpido en algunos aspectos pero cuando se trata de luchar me concentro totálmente. No es la primera vez que me topo con un adversario tan fuerte y tan escurridizo como tú, chiquilla. Y verdaderamente eso es muy molesto; mi estilo favorito de lucha es embestir a lo bruto y luchar contra centenares de guerreros a la vez. Pero cuando se trata de luchar contra un solo objetivo, y además, tan pequeño como tú, la cosa cambia mucho. Pero yo llevo miles de años luchando, durante los cuales he perfeccionado mi técnica hasta el límite...y ahora...-extiende sus brazos, cerrando fuertemente los puños-Grrrrrrrr...-sus músculos comienzan a tensarse y a incrementar su masa.-¡¡¡Aaaaah!!-empiezan a aparecer venas por todo su cuerpo, debido a la alta tensión a la que se está sometiendo Brute, y sus músculos se inchan de golpe.-¡¡¡YAAAAAAAAAAA!!!
Una luz intensa ciega por unos instantes a Andira. Brute se ha hecho aún mas enorme y musculoso que antes.
-Ahora he incrementado todas mis facultades físicas. Quizás siga sin ser tan rápido como tú pero podré seguirte el ritmo.
Brute se lanza a toda velocidad hacia Andira y prosigue con sus tajos de guadaña. Ahora el vendabal de "sablazos" es mucho mas veloz, numeroso y fuerte que antes. Los tajos destrozan el suelo y los alrededores, desde una distancia muy considerable. A la pirata le cuesta mucho mas esquivar todos los cortes.
-Ten un solo descuido, un solo desliz...-dice el grandullón mientras ataca sin descanso.-¡¡¡y te partiré en dos!!!
Andira comprende que esquivando sin parar lo único que hace es perder el tiempo, así que decide pasar al ataque.
-¡¡¡YIIIIAAAAAHHH!!-Andira lanza una serie de veloces puñetazos, que pasan entre los tajos y golpean todo el pectoral de Brute.
A pesar de haber recibido todos los impactos Andira solo consigue hacerle retroceder unos centímetros.
-Hum. Pequeña, al fin has entendido que no me puedes vencer tan solo evitando mis golpes. Pero vas a tener que emplear mucha mas fuerza.
Andira no se lo piensa dos veces, con una mezcla de velocidad y contundencia, aparece frente a él, echa su puño todo lo atrás que puede y lo incrusta en su cara, con una fuerza tal que lo desestabiliza haciéndole caer. Antes de que toque el suelo, Andira se coloca bajo su espalda, acostada en el suelo, y le golpea con la planta de sus pies, elevándolo a diez metros de la superficie de Pepper. Entonces, rapidamente aparece de un salto, de nuevo, frente a él, y le golpea el estomago con sus dos manos entrelazadas, haciéndole morder el polvo de la base.
-"Esta vez si."-piensa Andira mientras baja a tierra.-"No tengo tiempo que perder."
Contra su precipitado pronóstico, Brute se levanta como si nada, ni siquiera ha soltado en ningún momento su guadaña.
-"¡Mierda, este tipo es mas resistente que las bestias con las que me enfrento en el desierto!"
-Pareces sorprendida. Tus golpes son aún mas fuertes que antes, tienes un puñetazo muy contundente...y encima por alguna extraña razón pareces no desfallecer en absoluto. Pero sigue sin ser suficiente. Con esa fuerza, para desgastarme físicamente, te harían falta horas.
-"¿Horas?"-piensa Andira.-"¿De qué habla este tío? No tengo tanto tiempo."
-No quiero pelear tanto rato, el jefe Jinma no tiene tanta paciencia, así que ya va siendo hora de que te destroce los huesos de una vez.-Brute extiende la guadaña en perpendicular a su cuerpo, cogiéndola con las dos manos.-¡¡Damned Scythe!!
Tras el grito de Brute la guadaña empieza a brillar y a expeler una especie de niebla purpúrea:
-Esta guadaña-habla Brute.-fue forjada en lo mas profundo de Ankokumakai. Los brujos que la crearon sellaron en ella una maldición, que una vez activada es letal. Hacía tiempo que no usaba este poder.
-¡¿Cómo?!
-Ahora si debes esquivar sus cortes, de lo contrario perecerás sin remedio.
Korto escupe sangre, el golpe de Goku ha causado su efecto pero no ha sido definitivo. El joven mestizo habla:
-Escucha, no es mi intención quitarte la vida, tan solo déjanos marchar y...
-¡Ahórrate esas estupideces de buen samaritano!-Korto parece enfurecer ante la actitud del pequeño.-¡Estás hablando con un ser de la estirpe demoníaca! Es una lástima que todo ese potencial de combate que posees sea utilizado por un energúmeno tan tipicamente altruista. Vosotros habéis osado entrar en esta base sin el permiso del Imperio y eso es un acto de alta traición. ¿De veras piensas que vas a salir de aquí con vida? Es mas, el Imperio no puede dejar que alguien con tu fuerza vague por ahí libremente.
Goku queda pensativo. Se acaba de dar cuenta de por qué Kami Sama insistía tanto en que no mostrara su fuerza. Ahora sus decisiones serán cruciales para el futuro de su viaje.
-Bien, tienes razón.-asiente Goku.-A veces peco un poco de ingenuo, no lo puedo evitar. Sigh.-suspira.-Entonces no hay otra alternativa...
-Así me gusta, muchachito. Si titubeas una sola vez en la batalla estás sentenciado.
-Quizás a los demonios no os pase, pero es algo normal en los humanos el tener nuestras dudas.
-Jujujuuuu. Humanos...¿de veras tú eres humano?
Goku se sorprende ante la posibilidad de que su adversario advierta algo sobre su estirpe. Korto extiende sus brazos, con sus manos abiertas de par en par en dirección al chaval, y con un rápido gesto inmoviliza al pequeño.
-¡Ughk! ¡¿Qué me has hecho?!
-Parece que si eres humano después de todo. Te falta frialdad en la batalla. Te acabo de decir que en un combate no se debe bajar la guardia en ningún momento.
-¡Grrrrrrrr!-Goku intenta zafarse de la prisión mental de Korto.-¡Maldito cobarde, suéltame y pelea limpio!
-¿Soltarte? No podrás soltarte, he empleado gran cantidad de energía en este ataque de inmovilización. No es que no quiera pelear mano a mano, es que no quiero alargar el asunto mucho mas, y no es plan de tenerte danzando de aquí para allá como una rata escurridiza.
Korto se acerca a su adversario. Con una mano mantiene la inmovilización y con la otra se dispone a atacar:
-Veamos cuanto aguantas sin reventar, "humano". ¡Falcons Wind consecutivos!
Con su mano derecha empieza a lanzar una serie de sus demoledores ataques, que golpean una y otra vez el cuerpo de Goku Jr., su cabeza, sus brazos, su estómago, sus piernas. Entonces llega el dolor, el agobio.
-"Mierda, Pakku"-piensa Goku.-"He de hacer algo o..."
Las palabras de Korto zarandean de nuevo su mente, igual que los impactos que sigue recibiendo sin cesar: "si titubeas una sola vez en la batalla estás sentenciado". De pronto la furia, alimentada a base de brutales golpes, alimentada por el pensamiento de que su amigo pueda estar en peligro..."Abuela Pan". Goku Jr. recuerda a su anciana, casi llora, pero ese llanto es reprimido de ipso facto por la rabia, que acaba convertida en un intenso destello.
¡¡¡FLAAASH!!!
El manto gris que cubría su cuerpo ahora juega con el viento, como si de una frondosa y elegante capa se tratara; dejando al descubierto una cabellera erizada, de un rubio platino resplandeciente. Sus ojos celestes, casi verdes, claros, y su cuerpo acariciado por un aura dorada, cegadora. Sin poder evitarlo, la energía interior del pequeño Goku fluye descontrolada, como si tuviera vida propia, buscando con desmedida avaricia a su adversario.
GLOSARIO DE TÉRMINOS:
*Fuerza y consistencia en las transformaciones:
Como vimos en las transformaciones de Oolong, cuando alguien se transforma en un objeto o en otro ser, a pesar de la apariencia, sigue teniendo la misma fuerza física. La duda está en si cuando se transforma en algún objeto contundente obtiene las características reales del objeto, como la dureza o la consistencia. En algunas transformaciones del cerdito (como cuando se convierte en moto) vimos que esto era muy dudoso.
Aún así Zurui domina la técnica de la transformación mejor que Oolong y Puar, y aunque no consigue mas fuerza, si que obtiene las características reales del objeto en que se transforma. ¡¡¡Incluso es capaz de imitar el olor de los seres vivos en los que se convierte!!! Además, sus transformaciones no tienen límite de tiempo alguno. Cabe reseñar que, como ya se comentó en el capítulo 11, Zurui procede de una tribu de zorros que poseían poderes mágicos innatos, y además, Zurui perfeccionó sus habilidades mágicas en la Escuela de transformaciones.
**Demonios colorados:
Este es mi pequeño homenaje al primer doblaje al castellano que tuvo la serie de anime en España. En aquel doblaje Bulma usaba esa expresión en el primer capítulo de la serie, en un momento de sorpresa. Fijaos bien y veréis como es verdad. Me chocó mucho cuando la escuché, jajaja. Parece mas una expresión típica de un doblaje latinoamericano, mas que castellano de España, ¿es verdad o no?
CAPÍTULO 21: CONTRAATAQUEEl intenso ki de Goku Jr. llega hasta la fortaleza secreta de los piratas del desierto. Desde su celda, Kami Sama ha seguido el curso de los acontecimientos mentalmente y ya no puede quedarse al margen.
-Lo que mas temía está ocurriendo. Ese jovencito ha estallado...Debo ir allí y detener esta locura o si no...
Dende hace un leve gesto de mano y la puerta de la celda se abre.
-¡¿Cómo?!-uno de los dos piratas guardianes se percata enseguida.-¡¿Qué pasa aquí?!
-¡¿Eh?!-dice el otro pirata, situado al otro extremo de la puerta.-¿Se ha abierto la puerta? ¿Cómo es posi...?
Antes de que el pirata pueda acabar la frase Kami Sama aparece frente a ellos. En un segundo inmoviliza a ambos con un movimiento de su bastón.
-¿Qué...que nos has...?-los piratas casi no pueden hablar.
-Tranquilos, solo os he inmovilizado durante un rato. Lo suficiente como para que no montéis demasiado escándalo, así que quedaos calladitos un rato.
El anciano se eleva unos centímetros del suelo y comienza a volar sobre el pasillo de las "mazmorras". Los dos piratas se quedan estupefactos.
-¿Has...has visto...eso?
-S...si. Ese viejo es...es el demonio.
Kami Sama llega hasta la puerta principal, que se abre a su paso. Al salir tuerce a la derecha, hasta llegar a la salida, pasando delante de unas cuantas habitaciones. Llega hasta el filo de la planta, hasta el grandísimo agujero en la roca. Unos piratas que hacen la ronda nocturna se percatan de su presencia:
-Mirad, ¿ese no es...?-dice uno.
-Si, parece el anciano raro que capturó el grupo de Andira.-dice otro.
-¿Y qué hace por aquí a estas horas? ¿Le habrán dejado salir?-pregunta el tercero.
-No lo se pero el tipo hace unos gestos muy extraños.-vuelve a decir el primer pirata.-¡Oiga, usted no puede...!
El anciano namekiano se lanza al agujero.
-¡¡¡¿Cóóóómo?!!! ¡Ese viejo está loco!
Dende aparece, al ras del ascensor, volando hacia lo alto de la fortaleza.
-"Todo es culpa mía."-piensa Kami Sama, sintiéndose responsable de la situación.-"No debí dejarle ir. Sigo siendo tan torpe como siempre."
Goku Jr. coloca su pañuelo rojo alrededor de su frente. Korto no da crédito a lo que ven sus ojos y por primera vez en mucho tiempo siente unos fuertes escalofríos recorriendo su espalda:
-¿Qué...qué ha pasado? Ha...ha cambiado. ¿Cómo ha podido deshacerse tan facilmente de mi poder mental? Y su...su energía es...
Goku desaparece ante sus ojos y vuelve a aparecer delante de él.
-¿Qui...quién eres tú?-pregunta Korto tembloroso, tratando de disimular su miedo.
El menudo super saiyano propina un tremendo puñetazo a bocajarro contra su estómago, que deja al demonio complétamente pasado.
-Ughk.-Korto lleva sus manos a su barriga, mientras un chorro de babas escapa de su boca.-¡Aghk! E...esta es tu...tu verdadera fuerza...
Con un último hálito Korto ataca a Goku Jr. Alza su mano y grita a malas penas:
-¡Fa...Falcon Wind!
El golpe choca contra la cara de Goku pero no tiene ningún efecto, su rostro no se mueve lo mas mínimo.
-Has gastado casi toda tu energía tratando de inmovilizarme.-expone el joven con un tono de voz grave y serio.-Nunca hay que dar nada por sentado en una lucha. No se debe confiar unicamente en una técnica para vencer al adversario.
Andira, que sigue luchando con Brute a escasos metros de su prisionero, también queda sorprendida al ver a Goku:
-"Ese chico...Hay algo diferente en él. Su expresión ha cambiado. No, no es solo eso...¿Qué es todo ese fuego que sale de su cuerpo?"
-Chiquilla, ¿en qué piensas?-pregunta Brute.-Parece que tu compañero está a punto de derrotar a Korto. ¿Cómo es posible? Él es el mas fuerte del Comando Especial de Defensa. Lo que son las cosas. Nunca pensamos que en este planeta hubieran guerreros tan poderosos. Habrá que avisar a los altos mandos.
-¡¿Qué?!-pregunta Andira un poco descolocada.
-Dejemos estar eso de momento. Ya habrá tiempo para ocuparse de ese pequeño. Ahora concentrémonos en lo nuestro.
Mientras tanto Kenchi aparece de entre los escombros de la sala de operaciones:
-¡Malditos bastardos asquerosos! ¡¡Kug...kug, kug!!-tose. Su aspecto es deplorable. Su brazo derecho roto y sanguinoliento, su cara sucia de polvo y su boca y su nariz chorrean sangre.-Se han aprovechado de la situación y me han inutilizado un brazo. ¡Esta me la pagan! ¡¡Me la van a pagar!!
En su ayuda acuden los soldados:
-¡Señor, ¿se encuentra bien?!
-¡Vosotros...! ¡Salid de mi vista inmediatamente!
-Oh, ¡lo sentimos! Pensamos que...
-¡¡Qué os larguéis, malditos estúpidos!!
-¡¡Uaaaaah!! S...si señor.
Los soldados salen despavoridos, los ojos asesinos de su comandante son síntoma mas que suficiente para temer por sus vidas. Pakku y Zurui bajan del tejado sigilosamente, y se esconden en la parte de atrás del edificio, al otro lado de la sala de entrenamiento de los brujos.
-Jefe,-susurra Zurui.-ese Kenchi parece muy cabreado.
-Yo si que estoy cabreado. Mató al pobre Plumb delante de mis narices.
-Si, pero...
-No pasa nada. Ahora tenemos su arma y la vamos a utilizar contra él.
-Pero no sabemos como funciona.
-Tú déjame a mí, jujuju. Soy muy bueno tocando artefactos extraños.
-¡¡¿Dónde estais, pequeñines?!!-grita Kenchi intentando provocarles para que salgan.-Sali-id, no me digais que después de...¡kuuuugk!...después de toda la estrategia que os habeis montado, ¿vais a volver a esconderos?
-Dice que nos escondemos.-se indigna Pakku.-Grrrrrr.
-Tranquilo jefe.
-Venga, chicos.-prosigue el comandante, que ahora está subido en el tejado que antes traspasó.-Salid. He matado a ese pequeñajo de mierda y ahora buscáis venganza, ¿verdad? No vais a dejar eso impune, ¿no es cierto?
-Se está burlando de la muerte de Plumb.-Pakku se cabrea.-Kkkkgggg...Al final voy a ir y voy a...
-Jefe, solo se burla de nosotros. Intenta provocarnos para que salgamos, pero si lo hacemos nos expondremos demasiado. No hay que subestimarle.
-Vamos,-de nuevo Kenchi.-si al final vosotros también os vais a reunir con ese patético aprendiz de pirata. Os espera en el Infierno.
-¿Patético aprendiz de pirata? ¿En el Infierno?-Pakku no aguanta su crispamiento.-¡Voy a salir y le voy a partir la cara, estoy harto de esconderme! ¡Zurui, transfórmate otra vez en pájaro y súbeme!
-Pero jefe...
-Escucha, Zurui,-el tono de Pakku se vuelve serio.-se bien lo que hago. Quizás muramos, pero ese tipo vendrá con nosotros.
-Buuufff...-resopla el zorro, no muy contento con la decisión de su jefe.-pues morir no entraba dentro de mis planes de hoy...
-Venga, no te quejes tanto.
-Está bien, está bien, ya voy.
Zurui se incorpora, da un salto en el aire y BOOOM, ante Pakku aparece de nuevo un gran águila real.
-Ahora súbeme al tejado.
-Si, si...ya voy.
Kenchi siente una voz en su interior:
-[[[Kenchi, ¿cómo están las cosas por ahí?]]]
-[[[Korto, ¿eres tú? Pues he tenido algunos contratiempos...sin importancia...¡Kugh, kugh!]]]
-[[[No los subestimes. Yo voy a ponerme en contacto con el Sr. Jinma para que ponga en marcha a la división de brujos.]]]
-[[[¡¡¡¿La división de brujos?!!! Pe...pero eso...]]]
-[[[Uno de estos chicos tiene mas poder del que podamos imaginar. Es muy peligroso. La cosa podría írsenos de las manos.]]]
-[[[Está bien, pero diles que no vengan aquí. Yo mismo me ocuparé de estos dos piratas. No son muy fuertes. Ya me he cargado a uno.]]]
-[[[¿Has dicho piratas?]]]
-[[[Si, he descubierto que son piratas.]]]
-[[[Deacuerdo, ocúpate de esos tú mismo. Voy a hablar con el Sr. Jinma y le daré esa información.]]]
Kenchi vuelve a dirigirse a sus "presas".
-Entonces, ¿qué va a ser, chiquitines? ¿Preferís que ponga a toda la base a buscaros?
-Eso no va a hacer falta.-suena la voz de Pakku.
Desde el otro lado del tejado aparece Zurui, con sus dos grandiosas alas extendidas, llevando a Pakku en sus zarpas y dejándolo suavemente en el suelo.
-Kukukuku. Vaya. Al fin habéis decidido enfrentaros a mí cara a cara. Que estúpidos.
-¡Cállate de una vez, gallináceo!-exclama Pakku.
-Parece que os veo muy envalentonados. Kukuku. No os penséis que porque me hayáis inutilizado un brazo vais a poder conmigo. Mas bien es al contrario. Con una sola mano puedo destrozaros en un segundo.
-Ya se que eres mucho mas fuerte que nosotros pero te digo yo que vas a caer.-dice con gran seguridad el jefe pirata, escondiendo el mini cañón en su espalda.
-Hacía tiempo que no escuchaba algo tan tonto. Había oído eso de que cuando un animal se siente acorralado puede ser muy peligroso...Kukuuu...Pero vosotros dais lástima. Desde el Infierno podréis arrepentiros de haber atentado contra el Imperio, siendo unos piratuchos de tres al cuarto.
-"Mierda, ¿cómo sabe que somos piratas?"-piensa Pakku.
Zurui se da cuenta del error que tuvo minutos antes pero ahora no es momento de sentirse culpable.
Korto y Goku Jr. se miran intensamente, uno a escasos metros del otro.
-¿Vas a estar así mucho tiempo?-dice el super saiyano.
-Es...espera unos segundos. Deja al menos que recupere el aliento.
-No tengo tiempo para eso. Mi amigo está en peligro.
-"Debo darme prisa, si no este crío..."-piensa Korto-[[[Sr. Jinma, ¿me oye?]]]
-[[[Korto.]]]-responde telepaticamente el viejo Jinma.-[[[Parece que estáis tardando mas de la cuenta en traerme a alguno de esos intrusos.]]]
-[[[Señor, las cosas se han puesto muy feas. Uno de los intrusos tiene demasiado poder. No se si podré vencerle.]]]
-[[[¿Cómo? ¿Me estás diciendo que un simple humano puede contigo?]]]
-[[[No parece un humano normal. Solicito refuerzos. Sería adecuado que la división de brujos se pusiera en funcionamiento.]]]
-[[[¡¡¿Qué?!! ¿Tan grave es el asunto?]]]
-[[[Si, señor. Es muy peligroso. Este chico podría hacer estallar toda la base si se lo propusiera.]]]
-[[[¡¡Pe..pero ¿cómo es posible?!!]]]
-[[[No tengo ni idea de donde ha salido este niño, pero sabemos que son piratas.]]]
-[[[¡¿Piratas?! ¿Qué piratas? ¿Desde cuándo los piratas son capaces de destruir una base del Imperio?]]]
-[[[Lo se, es muy extraño...]]]
-[[[Estáis junto a la entrada, ¿verdad?]]]
-[[[Si, señor.]]]
-[[[Echaré un vistazo a mi bola de cristal para ver como está el panorama.]]]
Jinma se encuentra en una habitación muy oscura, dentro del hangar principal. El viejo pulsa un botón de la pared y del suelo sale una pequeña plataforma cúbica y metálica. Al pulsar otro botón de dicha plataforma, una mini compuerta se abre en su parte superior, y de ella aparece una pequeña bola de cristal, que queda flotando a pocos centímetros del artefacto. Jinma hace unos estraños gestos con sus manos sobre la bola, sin tocarla. Al momento empiezan a aparecer las imágenes que le muestran la zona donde Goku y Korto luchan.
-[[[Ya os veo, Korto. Así que ese retaco de los pelos de punta es el que te da tanto miedo.]]]
-[[[Señor...yo...De veras, es peligrosísimo. Usted mismo puede captar su tremenda energía.]]]
-[[[Si, aunque por su físico no lo parece de él emana un aura muy intensa.]]]
-[[[Por favor, dese prisa.]]]
Jinma hace otro gesto con sus manos y la imagen de la bola se mueve hacia Andira y Brute.
-[[[Ummm...veo que Brute tiene la situación controlada.]]]
-[[[Yo tampoco me fiaría mucho, señor. Esa chica tampoco es muy normal. No logro captar su energía. Ni siquiera cuando está luchando.]]]
-[[[¿Esa chica? Un momento.]]]-la bola enfoca de cerca la cara de Andira.-[[[¡¡¡Esa chica es...!!!]]]
-[[[¿Qué ocurre, mi señor?]]]
-[[[Me has dicho que son piratas, ¿verdad?]]]
-[[[Si, Kenchi lo descubrió.]]]
-[[[Entonces me temo que ya se de donde vienen estos intrusos.]]]
-[[[¿De dónde, mi señor?]]]
-[[[Son piratas del desierto.]]]
-[[[¡¿Cómo?! Si no es indiscreción, ¿cómo lo ha averiguado?]]]
-[[[La cara de esa chica es inconfundible. Ese jabalí apestoso nos ha traicionado.]]]
-[[[Habla de ese tal Youmaoh que controla los desiertos, ¿verdad?]]]
-[[[Claro, ¡¿de quién si no iva a hablar?!]]]-Jinma parece cabrearse.
-[[[Pe...perdone, señor.]]]
-[[[¡Ese jabalí se ha reído de mi benevolencia! No debí regalarle aquel arma hace casi cuatro años.]]]
-[[[Entonces, ¿qué hacemos?]]]
-[[[De momento dejaremos que Brute se encarge de la chica. Tú trae a ese chico aquí, hasta la puerta del hangar.]]]
-[[[Pero eso es muy peligroso, Sr. Jinma.]]]
-[[[¡No rechistes! Yo mismo junto a la división de brujos nos encargaremos de él. Después tú te dirigirás a la base de Youmaoh junto a todos los efectivos aéreos. Ese jabalí va a recibir el contraataque que se merece.]]]
-[[[Está bien, señor. Kenchi ha dicho que él mismo se ocuparía de los otros intrusos. Esos no parecían tan fuertes. Y yo le llevaré a este pequeño monstruo hacia allí.]]]
-[[[Eso espero.]]]
Korto vuelve a centrar su atención en Goku.
-Está bien, pequeño. No te haré esperar mas.
-¿Has descansado ya lo suficiente?
-Juju. Si, con estos tres minutos me ha bastado.
-Entonces continuemos.-Goku pasa a una pose ofensiva.
-Espera. Aquí no puedo emplearme a fondo. No quiero destruir mas la base.
-A mí eso no me importa. En estos momentos lo único que quiero es acabar cuanto antes.
-En ese caso no perdamos mas el tiempo. Sígueme. Si no lo haces iré a donde están tus otros amigos y los mataré en un segundo.
-¡Bastardo! Está bien, vamos.
Korto sale volando, seguido por Goku. Andira se sorprende:
-¡Oye, tú! ¡¿A dónde vas?!-pregunta la pirata a su prisionero.
-¡No te preocupes! ¡No voy a huír!-responde Goku mientras se aleja volando.-Solo voy a acabar con esto de una vez.
Korto habla mentalmente con Brute:
-[[[Brute, los planes han cambiado. Voy a llevar a este chico hacia el hangar principal.]]]
-[[[¿El hangar? Pero...]]]
-[[[El viejo Jinma se ocupará de él.]]]
-[[[Está bien. En cuanto me ocupe de esta chica iré para allá.]]]
-[[[Si, eso debes hacer. Pero ten cuidado, esta gente no es normal.]]]
-[[[De eso ya me he dado cuenta.]]]
-"No me gusta nada esta situación."-piensa Andira.-"Nada está saliendo como lo planeamos. ¿Dónde estarán Abok y Kostello?"
No muy lejos de allí Abok se encuentra buscando a Kostello. Situado al otro extremo de la base, entre un gran edificio; el garaje, y la fortaleza de piedra que se extiende protegiendo todo el pabellón.
-¿Dónde se habrá metido Abok? De verdad que cuando se pone no hay quien lo encuentre.
De pronto, desde su espalda alguien le habla:
-Vaya, al fin habéis bajado.
Abok se da la vuelta totalmente exaltado:
-¡Kostello! ¡Al fin te encuentro!
-Mas bien te he encontrado yo a tí, ¿no te parece?
-¡Rápido, tenemos que irnos!
Kostello rasca su mejilla con un gesto de total despreocupación y dice:
-¿Irnos? Tenemos una misión que cumplir, ¿recuerdas?
-¡¿Cómo?! ¿La misión? La misión ya no tiene sentido...¡Nos han descubierto!
-Jujuju. Ven conmigo un momento.
-¡¿Qué?!
Kostello guía a su compañero a lo largo del callejón creado entre el garaje y la fortaleza, llevándolo hacia la esquina mas cercana al hangar principal, entonces se asoma y dice:
-Mira, eso de ahí es el hangar donde guardan las armas que el señor Youmaoh nos dijo. Los planos seguramente también estarán ahí.
Abok también se asoma y divisa un enorme hangar, un gigantesco edificio incrustado en la roca, con una fachada metálica de formas grotescas y oscuras. A los lados del edificio dos grupos de soldados lo resguardan.
-¿Y qué me quieres decir con esto, Kostello?
-¿No lo ves? Estamos a un paso de lograr nuestro objetivo. Tan solo tenemos que esperar el momento oportuno y...
-¡No! ¡Escucha! Te repito que nos han descubierto. ¡¿No sabes que ha caído uno de los nuestros?!
-¿Cómo? Vaya...juju...espero que haya sido ese gordo apestoso.
-¡¿Qué?! ¡¿Qué dices?! ¡No, ha sido el pequeño Plumb! ¡Debemos volver!
-¿Volver? ¡¿Volver?!-el tono de Kostello se vuelve histriónico.-¡¿Con lo que nos ha costado llegar hasta aquí?!
-¡Si! Debemos volver junto a Andira. Ella se ha quedado luchando para que te encontrara y te trajera de vuelta.
-Uuummm...La jefa es muy fuerte. Yo no me preocuparía por ella.
-Pe...pero...¿No lo entiendes? Tenemos que irnos o si no...
-¡¿O si no qué?!-el tono de Kostello estalla, su ceño se frunce con fuerza.-¡No pienso dejar pasar esta oportunidad! ¡Si llevo esos planos al señor Youmaoh se reconocerá mi valía! ¡Seré un héroe entre los piratas del desierto!
-¡¿Es eso lo único que te importa?!-Abok le replica.-¡¿Cómo puedes hablar así en un momento como este?! ¡Ha muerto uno de los nuestros!
-¡¿Y qué?! Él se lo ha buscado. Ese estúpido criajo sabía a lo que se exponía. Muriendo tan solo ha demostrado su insensatez y su inexperiencia. Nos retrasábamos por su culpa así que su muerte para mí tan solo significa un escollo menos en la misión.
-¡Eres, eres...!
-¿Qué vas a decir? ¡Venga, suéltalo!
-Sabes, a veces me averguenzo de ser tu compañero.
-Que tieeeerno...jajaaa. Escúchame bien, Abok: nosotros somos PIRATAS, ¿entiendes? Piratas del desierto...Y toda esa sensiblería no va con nosotros. Somos ladrones, bribones...¡Somos escoria! Y me da igual todo ese rollo familiar que me quieres meter en la cabeza. A mí lo único que me vale es el respeto entre los de nuestra calaña. O pisas o te pisan. Esa es nuestra ley.
-Sabía que pensabas así...pero nunca creí que llegaras hasta este extremo. De todos modos no puedo dejarte ir. Las órdenes de Andira son llevarte de vuelta. Son las órdenes de un superior y no las podemos desobedecer.
-Jojo. ¿Sabes? Antes de salir tuve una pequeña charla con el señor Youmaoh. Él ya sabía que algo como esto podía ocurrir, así que yo recibí órdenes concretas.
-¡¿Qué?! ¡¿A qué te refieres?!
-Solo te diré una cosa: si no vas a ayudarme apártate de mi camino. No me entorpezcas.
-Pero...si te descubren...
-Sabes que no es tan fácil que eso ocurra.
En ese justo momento dos sombras venidas de las alturas les interrumpen.
-¿Qué? ¿Qué es eso?-pregunta Abok.
-Mira.-Kostello señala al cielo.-Por allí se acerca alguien.
-No les distingo bien, pero pa...parece aquel chico, el prisionero...y el que va delante parece aquel tipo...
-¿Aquel tipo?
-Si, Andira se quedó luchando con un tío gigante...y nuestro prisionero se iva a enfrentar a uno muy bajito. Parece que es ese.
-Ah, el gigante estoy casi seguro de que se trata de Brute, y el pequeño debe de ser Korto, dos de los miembros del Comando Especial de Defensa de la base.
Así era. Goku y Korto sobrevolaron la base en dirección al hangar principal. Los efectivos aéreos y las torres de vigilancia habían recibido instrucciones de no interferir en ese vuelo, y dejar pasar a su superior junto al intruso. Es así como, sin ningún problema, Goku Jr. y Korto aterrizan frente al susodicho hangar.
En la puerta del hangar dos grupos de cuatro soldados a cada lado de las enormes puertas. En cada extremo del edificio uno de esos contenedores fluorescentes que el grupo de Pakku también divisó en la entrada de la base y, frente a cada uno de ellos, tres hileras de edificios. En orden; dos son las barracas de la división de brujos y uno el arsenal de los mismos.
-Entonces, ¿es aquí donde quieres que luchemos?-pregunta Goku Jr.
-Si, aquí es.-responde Korto.
-Vaya,-dice el pequeño echando una hojeada al terreno.-no querías que destruyéramos la base, ¿y me traes justo a las puertas de esta especie de recinto? Creía que esta era la parte mas importante y resguardada.
-Tranquilo, pequeño, ya mismo lo entenderás.
Korto no había terminado de pronunciar sus palabras cuando las inmensas puertas del hangar comienzan a descubrirse. Conforme se abren en su interior se va dibujando el contorno de una extraña figura, un menudo ser hace acto de presencia. Cuando las puertas se terminan de abrir, la luz de la base nos muestra un viejo demonio, de no mas de un metro y medio de altura, de orejas puntiagudas, con dos cuernos negros incustrados en su piel, a ambos extremos de su cráneo. Su rostro el de un anciano de aspecto desnutrido, lleno de arrugas, con unos ojos vivaces y un maxilar inferior alargado hacia abajo. En su boca apenas unos pocos dientes afilados. Su cuerpo raquítico y encorbado, mostrándonos el contorno de sus costillas. Sus brazos y piernas exageradamente delgados. Su ropa consiste en un tejido blanco arremolinado alrededor de su cuello, seguido por una inmensa capa verde oscura que hasta cubre su pectoral. En su entrepierna una especie de calzones rojo oscuros, de un material consistente, con el símbolo del Imperio dibujado en el centro. Sus piernas desnudas hasta la mitad de la pantorrilla, donde unas botas marrones cubren sus pies. Unos brazaletes dorados cubren sus brazos casi hasta los codos. Los dedos de sus manos nos dejan ver unas uñas afiladas y negras. En su derecha un báculo de madera parece ayudarle a sostenerse en pie. El bastón es largo y recto, excepto en su parte mas alta, donde dibuja un leve siseo y donde, después de cuatro salientes; como cuatro extensiones de rama cortadas, parece tener incrustada una especie de piedra mineral, un cristal verde y muy brillante. El pequeño Goku se dirige al nuevo individuo:
-¿Quién eres tú? ¿Eres el jefe de la base?
El individuo se sorprende un poco y contesta:
-Jujuju. Hacía tiempo que nadie se dirigía a mí con ese tono tan impertinente.
-¡Mocoso,-salta rapidamente Korto.-no le hables así al Sr. Jinma!
-¿Sr. Jinma?-se extraña Goku.-Que nombre mas raro.
-No pasa nada, mi buen Korto.-dice Jinma.-Déjanos solos, tú tienes que llevar a cabo otra tarea.
-¡S...si señor!-responde Korto apresurado.
-Las tropas aéreas de asalto ya están preparadas.-expone el anciano.-Ve y lleva a cabo nuestro contraataque.
Korto se dispone a salir volando, pero Goku le dice:
-¡Un momento! ¡¿Huyes?! Pensaba que me traías aquí para luchar.
-Jaja. Lo siento,-contesta Korto.-pero nosotros ya hemos bailado demasiado esta noche. Y tranquilo, a partir de ahora vas a poder luchar hasta aburrirte.
Korto desaparece y se teletransporta al frente de las tropas aéreas, muchos metros por encima de la base, donde ninguno de nuestros protagonistas pueden verles ni oírles.
-¡Vamos!-grita el menudo comandante.-¡Ya sabéis cuales son las órdenes! ¡Tomemos rumbo al desierto y destruyamos la base de esas sabandijas!
En un destello Korto y las pequeñas aeronaves desaparecen en el orizonte, en dirección a la fortaleza secreta de los piratas del desierto, dispuestos a llevar a cabo un indiscriminado CONTRAATAQUE.
CAPÍTULO 22: SIN DOLOR NI SUFRIMIENTO NO HAY RECOMPENSABrute y Andira se miran intensamente. Aunque ninguno de los dos parece decidirse a atacar, es Andira quien toma la iniciativa. Sale disparada con una carrera furiosa y, aprovechando su pequeño físico, se lanza en plancha y pasa entre los pies de su oponente, colocándose a su espalda. Desde ahí golpea con sus dos puños justo en medio de la columna de Brute, lanzándolo contra otro edificio: el arsenal de los soldados rasos. No contenta con esto Andira continúa su ataque apareciendo frente a su adversario. Brute aparta unas escopetas de encima suya, estrujándolas con su mano derecha como si fueran de mantequilla. Seguidamente trata de levantarse, pero Andira golpea su barriga con sus dos pies, haciéndole vomitar sangre púrpura. Pero el gradullón se repone en cuestión de segundos y, aún sin levantarse, golpea el cuello de la chica con el mango de su guadaña, haciéndole impactar contra el suelo. Andira se levanta, sangrando por la boca.
-¡Arf, arf, arf!-Brute jadea.-Eres grandiosa, chica.-se levanta, se acerca a Andira, y para a unos cinco metros de ella.-El mas fuerte adversario con el que me he enfrentado nunca. A pesar de mi power-up aún consigues golpearme con dureza.
-"Tiene una resistencia tremenda."-piensa la chica pirata.-"Por mas que le golpeo no logro tumbarlo. Voy a tener que emplearme mucho mas a fondo."
-Bien, ha llegado el momento de pasar a mayores. Esta vez vas a caer.
Brute alza su guadaña con su mano derecha, por encima de su cabeza y grita:
-¡¡Estás acabada!!-La guadaña empieza a emanar una niebla de color morado, que se transforma en una pequeña ventisca que recubre toda la extensión del arma blanca. Entonces la agarra con las dos manos y lanza un tajo que hasta corta el suelo.-¡¡Scithe Whirlwind!!
El tajo se convierte en un enorme torbellino púrpura que alcanza a la chica. Andira queda atrapada dentro del pequeño huracán, que toma posición vertical al suelo, le hace dar vueltas y la desestabiliza totálmente. Es entonces cuando la ventisca comienza a propinarle infinidad de tajos. Uno de ellos corta su cabello, su larga coleta, otro corta su manto en dos y otro le hace un pequeño corte en su brazo derecho. Con esfuerzo Andira logra reponerse y estabilizar su cuerpo. Acto seguido golpea el suelo con su pie derecho, provocando un brutal socabón a varios metros a la redonda y haciendo que la ventisca se disipe.
-Vaya, además de ser fuerte sabes desenvolverte muy bien. Has sabido deshacerte de mi técnica. Nadie lo había conseguido. Una vez mi técnica los atrapa mis adversarios suelen acabar cortados en pedacitos.
-Grrrrrr.-Andira parece cabreada. Arranca lo que queda de su manto, dejando su cuello y todo su cuerpo al descubierto. Rompe un trozo de tela y lo ata sobre la pequeña herida de su brazo.
-Jajaja. Es inútil que cubras tu herida. Como ya te he dicho mi guadaña está maldita. Sus cortes son letales y si te hieren, la herida se expande poco a poco. En cuestión de media hora tu brazo se desmembrará de tu cuerpo.
-¡¿Qué?!-Andira mira al suelo y ve su coleta cortada y deshecha. Toca su cabello; ahora corto, entonces estalla encolerizada y vuelve al ataque.-¡¡¿Cómo te atreves?!!
Andira vuelve a la carga una vez mas, tan rápidamente que incluso Brute la pierde de vista.
-¡¡¿Ah?!! ¡¿Dónde estás?!
En milésimas de segundo la pirata aparece frente al "machuchón" y le propina un fuerte codazo en la barbilla. Brute se repone y trata de cortarla con la guadaña. A eso Andira responde con un puñetazo contra el filo del arma, que rompe en pedazos toda la mortífera hoja metálica.
-¡¡¿Qué...?!!-dice Brute viendo como su guadaña se deshace en pedazos.-¡Es...es imposible!
Andira se agacha un poco y pisa con su pie derecho la rodilla zurda de su oponente, rompiéndole la rótula en dos.
-¡¡¡Giaaaaaaaaaagh!!!-todo el inmenso cuerpo del fortachón se retuerce de dolor. Se acurruca en el suelo y grita:-¡¡Ah-ah-aaaaaaaaaaaaaarrrg!!
Andira, sin mostrar compasión alguna por el sufrimiento de su contrincante, golpea de nuevo su barbilla con una patada, levántándolo a diez metros del suelo. La chica salta y vuelve a golpearle en el aire con un potente puñetazo, que lo envía a chocar contra la fortaleza de roca atravesándola de lado a lado.
Fue en ese momento cuando Andira pudo encontrar algo de calma y mirar a su alrededor. Antes no se había percatado pero ahora sus pies se posaban dentro de la Base Pepper, la antaño bienavenida aldea que traía a su mente toda una serie de recuerdos y sensaciones. Mira a su alrededor. Los oscuros y tétricos edificios ahora están tan cerca que la estremecen. Donde antes habían esplendorosas viviendas ahora se sitúan edificios militares, en el lugar donde antes los niños jugaban ahora no hay mas que vehículos de combate aparcados. Pero Andira no es de las que se dejan llevar por la nostalgia así que centra su mente en el presente y, viendo que su adversario no da muestras de poder continuar el combate, decide salir volando en la misma dirección que tomaron su prisionero y aquel esbirro del Imperio.
El apresurado vuelo de Andira no la deja fijarse en que a escasos metros Pakku y Zurui luchan por su vida en el tejado de la sala de operaciones. El zorro, que ha vuelto a su forma normal, y su jefe se encuentran frente a frente con el temible y despiadado Kenchi.
Hace cuatro años hubo un día que marcó una nueva época, un día en que el cielo misteriosamente oscureció en toda la faz de la Tierra. Ese día los ejércitos del gran señor Kaarat tomaron el control de la Tierra sin obtener ninguna resistencia. Entonces Pakku era un niño de diez años que ya había vivido alguna que otra aventura. Desde bien pequeño siempre mostró un gran orgullo y un espíritu tenaz, lo que le llevaba a denotar unas grandes dotes de liderazgo. Desde la guardería siempre había sido el líder de un pequeño grupo de maleantes, hasta que en el colegio conoció a Son Goku Jr. Pakku no se explicaba como aquel niño tan canijo podía ser el descendiente del gran héroe Satan y pertenecer a una familia de guerreros de gran renombre. Un día un gran viaje unió a los dos niños y Pakku acabó salvando la vida a Goku Jr. Ese fue el comienzo de una grandísima amistad. Pakku y Goku Jr. se hicieron amigos inseparables. El poder de Goku Jr. aumentó con su entrenamiento y su amigo Pakku fue testigo de todo eso, incluso le acompañó al Tenkaichi Budokai. Pero todo cambió cuando el Imperio llegó a la Tierra. En aquellos días oscuros ocurrieron muchas cosas que cambiaron la vida de Pakku, entre ellas la noticia de la muerte de Pan y Son Goku Jr. a manos del mismísimo Gran Maligno Kaarat. Pakku no podía...no quería creer esa noticia, se negaba a ello. En lo mas profundo de su ser aún anidaba la esperanza de encontrar a su compañero de fatigas. Algo en su interior le decía que su amigo aún seguía vivo. Con ese prsentimiento por bandera el niño lo dejó todo y se lanzó a una nueva cruzada para encontarle. Al principio le fue fácil viajar, el ejército de Kaarat aún no se había organizado del todo, pero según avanzaba el asentamiento de las tropas mas difícil era caminar sin ser visto. Así no tuvo mas remedio que viajar hacia el desierto, donde aún no habían llegado los hombres del Imperio. Pero al caminar sin ningún rumbo fijo enseguida acabó solo y desprotegido. Fue entonces cuando los piratas del desierto lo capturaron. Los piratas se burlaban de él debido a su juventud pero rapidamente demostró una gran fortaleza y un gran espíritu de sacrificio, lo que le valió los favores del señor Youmaoh. Poco a poco se fue abriendo un hueco dentro del mundo de los bandidos y hasta fue ascendido a jefe de grupo. Pakku se convirtió en el jefe de grupo mas valeroso de todos, no había nadie que mirara por los suyos tanto como él, nadie capaz de sangrar y sudar por otros si la situación lo requería. Sus dos compañeros, Zurui y Plumb, le tenían verdadero respeto, como jefe e incluso como persona. Los tres eran como hermanos. Hace unos instantes Pakku tuvo que ser testigo de como el cuerpo sin vida de su "hermano" Plumb caía desangrado y sin vida al suelo, y ahora el causante de ese terrible acto se encuentra frente a él, en un quebradizo tejado, dentro de una de las bases del Imperio. El enemigo es claramente superior pero aunque le cueste la vida no va a dejar la muerte del pequeño pirata impune.
-Zurui.
-Si, jefe.
El zorro sale corriendo mientras mete su mano derecha dentro de su zurrón. De él saca una nueva MGC de color azul claro, celeste. En carrera se concentra rapidamente y la lanza a su enemigo.
-Vaya, kuku...De veras vais muy envalentonados y me gusta que hayáis tomado la iniciativa, pero...¿dos veces lo mismo? Por favor...
Kenchi cierra los ojos, agacha la cabeza. Su presencia se torna de un tenebroso que asustaría al mas pintado. Zurui cesa su carrera totálmente intimidado. La MGC se acerca al malvado ser y a escasos centímetros de él se convierte en un huracán de unos tres metros de altura. Kenchi abre los ojos y esquiva facilmente el tornado. Con una mirada asesina y un gesto de ira desmedida Kenchi grita:
-¡¡¿Os burláis de mí?!! ¡¡¿Os pensáis que vuestros trucos de "magia para principiantes" van a funcionar dos veces conmigo?!! ¡¡Kuuuugh!! ¡¡Pátetica escoria humana!! ¡¡Estáis frente a un comandante del ejército del gran Kaarat!! ¡¡Es un insulto que unos críos, piratuchos de mierda, piensen siquiera en volver a rozarme!!
Un escalofrío recorre el cuerpo de Pakku y Zurui, amedrentados ante el agresivo espíritu de lucha de su adversario. Una gota de sudor frío recorre la cara de Pakku, desde su frente hasta su barbilla. Pero el joven pirata acude a su valor para reponer su quebradizo ego. Se coloca el arma de Capsule Corp. en su zurda, en el antebrazo, imitando a su dueño anterior. Apolla su mano derecha encima, a la espera de encontrar una oportunidad para disparar. Kenchi habla:
-Esa es mi arma. Kokuuuk. ¿Es a esa esperanza a la que te aferras? Dais lástima. Ni siquiera sabes usarla, y aunque averiguaras su funcionamiento, hace falta mucho mas que una descarga de ese juguetito para eliminarme. Reconocedlo de una vez. Estáis perdidos.
-Vas a pagar por cada gota de sangre que ha derramado Plumb.-la rabia se apodera de Pakku.-Por cada herida que le has hecho. Eso métetelo bien en la cabeza.
-Bueno, como esperaba no vais a dejar que os destroce tranquilamente, así que...Ahora me toca a mí atacar. ¡¡¡Kuooooooook!!!
Tras su grito de guerra, Kenchi alza el vuelo y se dirige hacia sus presas. Zurui saca otra MGC idéntica a la anterior de su bolsa y la lanza mientras huye hacia su jefe. La MGC se transforma en otro pequeño torbellino, que el esbirro del Imperio esquiva con facilidad. Kenchi es rápido en el aire y logra atrapar facilmente a Zurui, con sus pies en forma de garras. Las uñas se clavan en sus hombros.
-¡¡¡¡Aaaaargh!!!!-Zurui grita mientras su carne se desgarra y la sangre brota de las heridas.
El zorro logra escapar convirtiéndose en insecto, en una langosta del desierto.
-Jujuuu. Vuelves de nuevo con tus truquitos. Entonces iré tras tu compañero.
Kenchi prosigue su camino, volando a tres metros del tejado. Pakku apunta con el arma a su enemigo y pulsa uno de los tres botones, pero nada ocurre.
-Parece que te has equivocado. Kukukukuuu.
Kenchi se planta frente a Pakku y de un rápido zarpazo le hiere el pecho. Seguidamente otro zarpazo, que el pirata a malas penas logra esquivar, roza su mejilla y destroza parte de su oreja izquierda. Finálmente Kenchi agarra a Pakku del cuello, lo levanta en peso y lo lanza contra el suelo de la base. BOOOOM. De repente Zurui aparece delante del súbdito del Gran Maligno convertido en un gigantesco león. Kenchi ni se inmuta y responde con un formidable puñetazo, que manda al león hasta el otro extremo del tejado, que pertenece a la sala de entrenamiento de los brujos.
-Bien. Ya os tengo donde quería y ¿sabéis? Solo usaba ese arma para no tener que gastar mi propia energía. Kukuuu. Era un juguete nuevo y quería probarlo, pero tenéis que saber que mis técnicas energéticas son mucho mas devastadoras que las que lanza ese trasto asqueroso.
Kenchi, desde arriba del tejado, apunta con su mano izquierda a Pakku, que yace bajo sus pies, tirado en el suelo.
-Mierda, mi brazo.-se queja, dolorido, Pakku, que parece haberse dislocado su hombro izquierdo, el mismo conectado al brazo que sostiene el arma. Entonces, tratando de dejar a un lado el dolor, piensa:-"¿Por qué esta cosa no dispara? Antes he visto como ese aguilucho apretaba esos botones."
-Adiós.-sentencia Kenchi.
Justo cuando la descarga energética está apunto de generarse en la mano del monstruo con aspecto de ave, Zurui muerde el brazo herido de su enemigo con sus fauces de rey de las bestias, haciendo que el rayo estalle a unos metros de Pakku.
-¡¡Suéltame, cambiante de mierda!! Koook.
-¡Ahora, jefe! ¡Dispárale ahora!
Pakku a malas penas consigue levantarse y piensa:
-"Venga, funciona de una vez."-con una tenacidad sobrehumana, el joven consigue mentalizarse, mueve su brazo maltrecho con su otra mano, apunta a Kenchi y grita:-¡¡¡Dispara!!!
Una gigantesca ola de energía sale despedida del arma, en dirección a su rival. Pakku no está acostumbrado a usar armas de esa potencia y sale despedido hacia atrás, estampándose contra la torre de vigilancia contigua al edificio donde se encuentran la sala de operaciones y la sala de entrenamiento para los brujos. El brazo de Pakku se resiente por la descarga y el chico grita:
-¡Aaaaaaah!
En un instante Kenchi se deshace de Zurui-león con un cabezazo y logra evitar in extremis el descomunal ataque de ki. La ola de energía se pierde en el aire y el comandante, secretamente extasiado, dice para sí mismo:
-"Buuufff. No recordaba que había programado el arma con la descarga máxima. Esa aplicación aún no la había provado. En mi estado, si me pilla desde esa distancia hubiera tenido graves problemas. Esos de Capsule Corp...Cada vez fabrican armas mas peligrosas. Lo bueno es que solo le quedará energía para emitir un disparo mas."
Al mismo tiempo Zurui vuelve a su forma normal y corre a socorrer a su jefe:
-Jefe, ¿cómo estás? ¿Te encuentras bien?
Pakku escupe sangre mientras se incorpora. Zurui lo ayuda reposando el brazo dislocado de su jefe sobre su hombro.
-¡Aaaah, aaah! ¡No! !Quita, quita!-se queja de dolor Pakku rechazando la ayuda.
-¿Qué ocurre?
-Maldita sea. Me he dislocado el hombro al caer desde el tejado-dice mientras acaricia su brazo herido con su mano contraria.-y encima esa descarga lo ha empeorado.
-¿Cómo?
-Pero al menos he descubierto como funciona este cachibache. Reacciona al pensamiento.
-Bien. Entonces seré yo quien disparé la próxima descarga.
-No, yo lo haré. Tú solo trata de distraerlo para que pueda alcanzarle.
-Pero...-Zurui percibe una gran seguridad en el rostro de Pakku.-Está bien...Pero al menos cámbiate el arma de brazo.
-No. Puede que este arma no funcione si se utiliza en el otro brazo. Quizás sea una tontería pero no tenemos tiempo para arriesgarnos.
-Pero tu brazo no...-Pakku, con gesto exageradamente serio, lanza una penetrante mirada a Zurui y éste da por sentado que no logrará convencerlo.-Bah, eres mas cabezón que el creador de este fan-fic (Nota del autor: XD).-Zurui vuelve la mirada hacia su adversario.-Haré lo que pueda.
Pakku piensa:
-"Quiero ser yo quien se cargue a esa bestia, aunque me cueste uno de mis brazos. Ha matado a uno de los míos, es mi responsabilidad."
-¡Kuoook, kok, kok, kok!-ríe Kenchi desde el tejado, burlándose de los jóvenes piratas.-Ya os he dicho que ese arma no sirve para nada conmigo. Ahora os despedazaré con mi próxima técnica.
Kenchi alza su mano sana al aire y la baja a gran velocidad. Sus dedos dibujan cinco hilos de energía cortante que se dirigen hacia Pakku y Zurui.
-O no, jefe, huye. Yo voy a por él.
Pakku y Zurui salen corriendo tomando rumbos contrarios. Pakku hacia la izquierda de su contrincante y Zurui a la derecha. El ataque enemigo roza la pierna del jefe pirata. Zurui se percata de ello. La torre de vigilancia que estaba tras ellos queda seccionada perpendicularmente en cuatro trozos.
-Míralos. No paran de moverse.-de nuevo el gesto del monstruo se torna en una rabia desbocada y grita:-¡¡¡¿Pero es que no os dais cuenta de que mi velocidad está a tres mil años luz de la vuestra?!!!
Zurui salta y se convierte en una anguila que consigue atrapar a Kenchi alrededor de su pecho, aprisionándole los brazos.
-Otra transformación mas. Kooook. ¡Estoy hasta las narices!
Zurui-anguila lo electrifica pero Kenchi ni se inmuta.
-Kukukuuuu. ¡¡Ni toda la electricidad de este planeta podría siquiera llegar a dañar mi dedo meñique del pie!!
-"Mas bien pata, diría yo...Ju, ju...Uuggh."-piensa Zurui.
Kenchi hace fuerza con sus brazos y rompe la "presa" del zorro. Seguidamente lo coge al vuelo y lo estampa contra el tejado. Pero Zurui se repone facilmente y se convierte en una pitón enorme.
-¿Qué pasa?-pregunta harto el comandante del Imperio.-¿Quieres matarme de un ataque al corazón o qué? Por mucho que te transformes tu fuerza no parece aumentar en absoluto. Kuoook, kok, kok. Ahora solo eres una serpiente que de un soplido se irá a criar *llow-mas.
-Quizás si estuviéramos en otra situación si. Jiiiiisssss...-dice Zurui-pitón, siseando y sacando su lengua de serpiente para notar los olores de su alrededor.-Pero dentro de un momento serás tú el que salgas volando totálmente achicharrado.
-Se nota que sois piratas. Kok, kooo. Pero a mí vuestras palabras no me intimidan en absoluto. Sois demasiado ingénuos, aunque he de reconocer que sois muy resistentes. Aunque os haya pegado flojo es todo un alarde el hecho de que sigáis en pie.
-No, no esss esssso. Mira detrás de tí. Jijiiisssss.
-Tengo controlado al gordito, está a tu derecha, escondido debajo de este tejado. Kuku...Koook, cofff, cof, cof.-Kenchi tose sangre.
-Tampoco ess essso.
Entonces Kenchi nota una fuerte brisa a su espalda y se da la vuelta. Un gran tornado se acerca hacia él a toda prisa, destrozando el suelo a su paso. En su interior puede ver a un puñado de sus soldados dando vueltas sin cesar.
-¿Qué...qué es eso? Kugh, kuuuu.
-Lo que antesss he lanzado eran dosss conjuross de aire muy potentess. Se han juntado y han barrido a tuss hombressss...y ahora vienen a por tí.
Sin nada mas que decir Zurui da un coletazo a Kenchi y lo lanza dentro del torbellino. Acto seguido vuelve a tomar su forma habitual y grita.
-¡Jefe, ahora te toca a tí! ¡Dispara hacia ese huracán!
Pakku salta todo lo que puede y lanza un nuevo cañonazo. El remolino de aire absorbe el disparo y se convierte en un tornado de energía, que va calcinando todo lo que hay en su interior. Los hombres del imperio arden mientras braman y berrean alaridos de extremo dolor. El brazo de Pakku queda partido por diversos sitios.
-¡¡¡AAAAAAAAAH!!! ¡¡¡JIAAAAAAAH!!!-el dolor que tiene que soportar Pakku es tan fuerte que no puede ni contener sus lágrimas.
-¡¡Jefe!! ¡¡¿Estás bien?!! ¡Lo hemos conseguido!
Desde lo alto del torbellino una silueta salta hacia el cielo sin que los piratas se den cuenta. El huracán se disipa dejando volar en el aire un montón de ceniza.
-Mira jefe, todo lo que había en su interior se ha desintegrado. No ha quedado mas que polvo.
-Si, jeje.-dice Pakku, apollándose como puede en una de las rocas que antes formaba parte de la torre de vigilancia.
-Buuufff...Nos ha costado lo nuestro, pero Plumb por fin podrá descansar en paz.
De repente Kenchi aparece, desde arriba, frente al zorro.
-¿Có...cómo es posible?-el cuerpo de Zurui reacciona, su pelo se eriza como el de un gato y da un blinco hacia atrás en posición de defensa.
-¡Ya os lo he dicho hace un momento! Ese arma no sirve conmigo...Ku, kugh...-Kenchi tose humo, todo su cuerpo expele humo.
-Mier...Mierda. Otra vez ese desgraciado.-Pakku ya no puede con su alma, sus ojos se le cierran.-Ya no puedo ni moverme pero tengo que intentarlo de nuevo...
Pakku se recuesta en la roca, mueve su brazo izquierdo de nuevo con su mano derecha, tembloroso, a malas penas, y apunta a Kenchi. Se concentra, cierra los ojos y...nada ocurre.
-¿Qué pasa? Kukuuu.-dice Kenchi sin apartar la mirada del zorro.-¿Ya no funciona el arma? Kokoko. No, no es eso. Mira en el lado derecho del aparato.
Pakku ladea su brazo izquierdo y ve un pequeño botón que parpadea con una luz roja.
-Eso significa-prosigue hablando el enemigo.-que a ese trasto ya no le queda energía. Ya no vale para nada.
-"Joder, ni que fuera un móvil."-piensa Zurui.
-Y eso quiere decir-continúa Kenchi.-que este es el momento en que os mato.
El malvado ser se lanza hacia Zurui y le ataca con un puñetazo. El zorro rápidamente se convierte en una bola de goma, del tamaño de una pelota de baloncesto, para amortiguar el golpe, pero el impacto es tan potente que Zurui se estrella contra el suelo, vuelve a su forma normal y queda inconsciente. Seguidamente Kenchi baja del tejado con toda tranquilidad y se dirige andando hacia Pakku.
-Kukukuuu. Tal y como estás ya no puedes ni huir. Perooo, si pudieras, ¿lo harías?
-Kkkkkkggg.-Pakku, totalmente impotente, aprieta los dientes debido a la rabia.
-No, claro que no. Kokoo. Tú eres un jefe pirata querido y respetado.-paso a paso Kenchi se acerca cada vez mas a Pakku.-¿Cómo ivas a abandonar a los tuyos?
-¡¡Ca...cállate!!
-Después de todo no eres mas que un humano. Débil, terco y sumamente estúpido.
-¡¡Qué te calles!! ¡No...no te burles de nosotros!
-Como ese pequeño pirata al que maté antes con toda la facilidad del mundo. Kukukuuu. Kuoook, kok, kok. Vaya jefe que estás hecho. Después de todo ese rollo de vengar a tu compañero y no has sido capaz ni de salvar al que te quedaba. Kuok, kokoo. Pero no te preocupes, piensa como nosotros. ¿Qué mas da una baja mas que una baja menos? Si no eres fuerte no vales mas que para rellenar filas.
Kenchi para a unos centímetros de Pakku y de un fuerte patadón en la boca del estómago incrusta al joven contra la roca.
-¡Aaaaghk!-Pakku escupe sangre. Toda su boca se mancha de rojo.
-Y es que no se me ocurre la razón por la cual os habéis atrevido a entrar aquí. ¿Cómo se os pasa por la cabeza a unos bandidos de tres al cuarto tratar de infiltraros en una base del Imperio? Kuk, kuk, kuk. ¡¡No tenéis ni puñetera idea del acto de alta traición que eso supone!! Quiero que cuando llegues al Infierno incluso allí se sepa que todo aquel que se opone al gran Kaarat está destinado a sufrir las consecuencias.
Un puñetazo se incrusta en el hombro maltrecho de Pakku.
-¡¡Yiiaaaaaaah, aaaah....aaaarrrrg!!
-Y ahora...-Kenchi alza su brazo izquierdo, su mano toma la forma de una garra, sus uñas brillan con la luz de uno de los faros de la base.
La mente de Pakku en blanco, dándolo todo por perdido, haciéndose a la idea de que la muerte está a un golpe de su enemigo. Pero justo en ese momento algo roza su mano derecha, que estaba apollada en el suelo. Pakku, con gran disimulo, mira al suelo y ve una de las MGC de Zurui, una de color rojo. De reojo mira a su derecha y ve a su compañero tendido en el suelo mostrando un pulgar hacia arriba, como incitándole a usar la esfera mágica. Entonces Pakku mira a su adversario y dice:
-¿Puedo hacerte una pregunta?
-¿Cómo? Kuuuk.
Entonces Pakku grita:
-¡¡¿Qué se siente al ser derrotado por una "escoria" como nosotros?!!
Mientras habla Pakku rápidamente coge la MGC, se levanta impulsándose con su pierna herida y, con un acto totalmente instintivo, pulsa el botón, tal y como le ha visto hacer a Zurui momentos antes, y lanza la bola a Kenchi. La piedra se convierte en un manojo de llamas que envuelven el cuerpo del malvado, que se echa hacia atrás tratando de apagarlas. Sus alaridos son tan profundos que se oirían en kms a la redonda.
-Bien.-dice Zurui.-E...esas llamas solo se apagarán cuando hayan consumido totálmente a ese desgraciado.-tras estas palabras el zorro-humanoide agacha la cabeza y pierde definitivamente el conocimiento.
Pakku cae al suelo y es testigo de como su contrincante, entre chirridos, se va quemando paulatinamente, hasta caer también al suelo, completamente carbonizado. Nuestro héroe no resiste mas y debido al extremo dolor de sus heridas acaba desmayándose. Mientras todo esto ocurría Goku Jr. se enfrentaba contra el poderoso brujo Jinma, en un combate sin igual en el que fuerzas de distinta naturaleza chocaban sin parangón.
GLOSARIO DE TÉRMINOS.
*Llow-ma/llow-mas:
Las llow-mas son unas larvas de color azul oscuro que viven en el planeta de procedencia de Kenchi. Al contrario de las larvas de las moscas comunes de la Tierra, que son alargadas y en forma de gusano, las llow-mas tienen forma redonda. Estas larvas se comen los cadáveres y los descomponen. El insecto que deposita dichas larvas es el blugir, un bicho muy parecido a las libélulas, cuyo ciclo de vida es de 107 horas. Su época mas propicia para el apareamiento es el muser, la época mas caliente del planeta de Kenchi, equivalente al verano terráqueo.